Pirañas o palometas, diferentes pero similares

Siempre nos preguntamos a qué especie responde este pez dentado que solemos ver, de vez en cuando, en la Cuenca del Plata, en nuestro Delta o en lagunas interiores a donde se refugia en los meses más fríos. La respuesta nos la brindó un biólogo: “La diferencia entre piraña y palometa es una cuestión meramente semántica, es simplemente por cómo la llama la gente vulgarmente”, señaló el especialista en ecología de peces del CONICET. Las dos variedades que habitan nuestras aguas, tanto palometas grandes o pacusas como la común o ñata, pertenecen al mismo género que las famosas pirañas del Amazonas y pese a no ser de la misma especie, si son del mismo grupo y poseen una conducta agresiva muy similar. 

Su legendaria voracidad se reaviva cada verano y en especial con los picos de altas temperaturas donde se acelera su tasa metabólica que hace que estos peces estén muy activos y requieren más energía cambiando su dieta de omnívora a carnívora. Sin embargo, la violencia de su ataque es una buena excusa para provocarla si buscamos hacer pesca deportiva con ella, y de hecho es inspiración de un evento que se lleva a cabo todos los años en la provincia de Entre Ríos, más exactamente en el Club de Pesca Federación. 

Ahí, días atrás, más de 30 embarcaciones se dieron cita en las aguas del cauce del arroyo la Virgen para participar del XIII Torneo de la Palometa con devolución, contando no solo con la presencia de pescadores locales, sino también otros muchos de la región y localidades cercanas como Concordia, Santa Ana, Villa del Rosario y Chajarí quienes además conocen muy bien los secretos de esta pesca como nuestro amigo y colega Valentín Bonadeo quien junto con su equipo fueron ganadores del concurso con 93 piezas obtenidas y devueltas a su medio en apenas 4 horas de certamen. 

Se pescó en las aguas del inmenso lago que forma ahí la represa de Salto Grande, cerca de la costa y en poca profundidad, a no más de un metro y medio, con corazón y filet de sábalo combinados como carnada. Los anzuelos tienen que ser resistentes, chicos y de buena calidad ya que es un pez de una mandíbula muy fuerte y difícil de clavar. En cuanto a las cañas, fueron cortas en este caso, pero cualquiera prácticamente se adapta a esta modalidad, lo mismo que los reeles. Ahí se usaron modelos huevitos cargados con multifilamento de 25 mm, y un líder de 10 libras  (1 libra:= 453.5 g), muy necesario para evitar el corte que produce su fuerte dentellada que en la mayoría de los casos no va en proporción a su tamaño.