Cuero de Zorro: piques donde termina la ruta

Tras superar Trenque Lauquen, accedemos a la laguna por RN 33, vía que, si respetamos su traza original, nos deposita en una bajada de embarcaciones. Las inundaciones que se han dado reiteradas veces han dejado secuelas y ya, al recorrer esta ruta podemos advertir llamativas defensas de piedras a la orilla de la misma, barreras que se crearon en los distintos desbordes que sobre la década del 80 generaron un espejo como Cuero de Zorro, de grandes dimensiones y que obligaron a las autoridades de la Dirección de Hidráulica bonaerense a realizar una serie de canalizaciones que incluyeron esa modificación en la traza de la ruta. Si seguimos esa rampa donde se bajan los botes se pueden advertir los palos de luz semi sumergidos que aparecen del otro lado, ya sobre el Partido de Rivadavia. 

Hoy son poco más de 1.000 hectáreas de forma alargada, con una profundidad máxima de casi 3 metros. Con costas bajas y algunos barrancos, se nutre de un canal que la conecta al Río V, que trae aguas de Córdoba y San Luis, y se conecta por otro canal artificial con el sistema lagunar de Las Tunas, que tiene como drenaje final al Río Salado. En sus costas se encuentra el camping municipal, donde podemos acampar y hay importantes servicios: mesas, fogones, sanitarios, luz eléctrica, carnada, limpieza de pescado, bajada de lancha, alquiler de embarcaciones y una amplia costa que permite realizar la actividad en dicha modalidad. 

Víctor Narváez, propietario de La Calandria, un emblemático comercio del ramo en General Villegas, opera como guía embarcado y también suele disfrutar de costa, como hizo en los últimos días. Nos contaba que la diferencia la hizo ingresando con waders y con el uso de equipos pesados. De esa manera, poniendo el plomo lo más lejos posible, dio con una veintena de pejerreyes. Los ejemplares más chicos deberían rondar los 200 gramos, y los mejores, oscilaron los 400 a 500 gramos, lo que habla a las claras de que la pesca que se da embarcados, también se da de orilla, siempre respetando esa premisa de ganarle distancia al tiro, sin dudas, ese es el gran secreto en una modalidad que es muy fácil, no tiene más complicaciones que esa, y nos permite pescar tomando unos mates en la orilla y disfrutando de la costa. 

Cuero de Zorro embarcados, es un ámbito que nos permite lograr buenos resultados tanto pescando anclados como al garete, siendo en este momento, el paternóster, bien calibrado, la mejor opción, trabajando en alrededor de los 2,5 m. Hay momentos que se da a flote, más a partir del mediodía, con brazoladas de 20 a 40 cm para tentar los pejes, siempre buscando un buen encarne, preferentemente mojarra viva y la posibilidad de un filet de dientudo como tentación adicional, y un anzuelo generoso para evitar el pescado de medida. Los matungos están, pero no son fáciles de lograr.  En estos momentos, es muy sensible el pique, hay que mover la línea para que el pejerrey tome. Muchas veces, sin mover el pater, ya la pieza esta enganchada. 

Nos contaba Víctor que la laguna sigue bajando mucho y preocupa de cara al futuro. Habrá que ver si algunas precipitaciones permiten la entrada a través del rio V. Además, la zona no escapa a uno de los grandes problemas de todo el país, hablando de carnadas para el pejerrey. Hay un faltante de mojarra importante, aunque Víctor cuenta de una mojarra plateada lomo negro excelente, en tiempos donde prevalece la mojarra azulada de correntada, la que más se ve ahora y que necesita muchos cuidados para vivir en cautiverio, se muere muy fácil, a diferencia de la otra, que resiste mucho más. 

El pesquero está abierto de lunes a lunes, salvo días de intensos vientos cuando por precaución no se permite la pesca embarcados, pero si hacerlo de costa. Igualmente, siempre es conveniente consultar por teléfono antes de emprender el viaje.

Servicios: 

• Víctor Narváez, guía de pesca. Tel.: (03388) 67-6316.
• Casa de Pesca La Calandria en Gral Villegas. Velurtas 1156.