La ciudad bonaerense de San Nicolás de los Arroyos está de fiesta porque en el día de hoy sus habitantes están festejando nada más ni nada menos que 273 años de vida.
San Nicolás fue fundada el 14 de abril de 1748 por Rafael de Aguiar; la persona más expectable y prominente de la historia local, y por su esposa, Paulina Ugarte, en un área de campo de las numerosas propiedades con las que contaba el millonario matrimonio.
Las 9 manzanas cuadradas fundacionales fueron diagramadas en el sector comprendido por las actuales calles Juan B. Justo, Colón-Aguiar, León Guruciaga; y Avenidas Moreno-Savio. Esta demarcación se realizó a partir del gran ombú de López, ubicado en la actual Avenida Falcón y calle Colón, el cual fue retirado en el año 1884 debido a que por esa zona comenzó a circular el Ferrocarril del Oeste.
Así, los límites del poblado serían entonces el río Paraná, y la actual avenida Falcón, las avenidas Savio y Moreno y la calle León Guruciaga, en tanto que el matrimonio Aguiar Ugarte distribuyó las parcelas ya formadas como manzanas entre sus cuatro hijos. Durante 1748, más precisamente el 14 de abril, la esposa de Aguiar heredó de su padre las tierras que actualmente corresponden al partido de San Nicolás de los Arroyos.
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Si bien según los historiadores, dicho nombre tuvo su origen en un pequeño altar en el hogar de los Aguiar, en devoción a San Nicolás de Bari, uno de los grandes problemas tuvo que ver precisamente con la asignación de ese nombre a dichas tierras, debido a la rotunda negativa de otras comunidades a aceptar el mismo, ya que tenían pensado otro para dicha localidad.
Entre los más esquivos a llamarla San Nicolás, se encontraba la familia Arias, quienes pretendían llamarla San Vicente, teniendo en cuenta su gran cercanía a la boca del arroyo donde se localizaba una capilla en honor a San Vicente Ferrer.
Así, juicios de por medio, finalmente la justicia favoreció la postura de Rafael de Aguiar, quien prometió levantar una capilla, realizar una estructura parroquial, la plaza del pueblo y las calles correspondientes.
Aunque en 1755 se construyó la capilla en veneración a San Nicolás de Bari, sus fundadores no pudieron disfrutarla mucho ya que Aguiar murió en 1758 y su esposa, Juana Paulina de Ugarte, un año más tarde.
El 1 de enero de 1766 el Cabildo en Buenos Aires designó oficialmente a Simón González como la primera autoridad del partido de San Nicolás de los Arroyo, con el objetivo de proporcionar la seguridad de la localidad y resolver los problemas más triviales.
San Nicolás, una ciudad en constante crecimiento
Por entonces, el partido de San Nicolás ya contaba con una población cercana a los 1.000 habitantes, varias estancias y una amplia cantidad de ganado. Durante la década de 1770 se inauguró una escuela primaria en la Capilla de San Nicolás y, por primera vez, se subdivide el partido, teniendo la misma distribución y vigencia hasta mediados de la siguiente década cuando esa región quedó bajo la administración de la intendencia de Buenos Aires.
A principios de 1780, la ciudad se organizó militarmente, contando con los servicios de 7 capitanes, tenientes y alféreces, así como también, 14 sargentos, 28 cabos y 382 soldados.
Mientras en la primera década del siglo XIX, San Nicolás de los Arroyos ya tenía aproximadamente 4.200 habitantes y 50 años más tarde alcanzaría los 9.000 pobladores, de los cuales 2.000 vivían en las zonas rurales, hoy la ciudad que está celebrando sus 273 años de vida cuenta con una población de 162.707 habitantes.
Su estratégica ubicación en el centro de la Argentina, a tan solo 70 kilómetros de Rosario y a 230 km. de la Ciudad de Buenos Aires, sumado al turismo religioso producto del culto a la virgen del Rosario la llevaron a convertirse en una de las ciudades más visitadas de la provincia de Buenos Aires.
La ciudad de San Nicolás es la combinación perfecta entre historia y naturaleza. Su amplia oferta incluye numerosas áreas de interés turístico como así también arquitectura, deportes extremos, arte, fe, aire libre y tradiciones
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