Personal de la Dirección de Fauna Silvestre, dependiente de la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático de Río Negro, liberó tres cardenales amarillos, una especie que se encuentra en serio peligro de extinción.
Según informó la mencionada secretaría a través de un comunicado de prensa, se trata de tres ejemplares machos que provenían de diversos secuestros y que, “luego de permanecer varios meses en el Centro de Cuarentena y Rehabilitación de los Guardafaunas Honorarios de la localidad de General Roca, finalmente, lograron recuperar sus músculos de vuelo en grandes jaulas voladoras y se encontraban en condiciones de volver a su estado de libertad, el que nunca deberían haber perdido”.
Especie en extinción
El cardenal amarillo es una especie que está en serio peligro de extinción debido, principalmente, a su captura ilegal, que parece no tener coto, habiendo sido, en los últimos años, salvajemente diezmada su población a números peligrosos para sostener la variabilidad genética de la especie en todo su rango de distribución.
Es por eso que la Fundación AZARA y la Asociación Aves Argentinas vienen llevando a cabo un trabajo interinstitucional en conjunto en cada liberación y monitoreo de la especie a lo largo y ancho de toda la provincia de Río Negro. “Un ave silvestre encerrada en una jaula, no es una mascota, es un ave privada de la libertad de su vuelo, su capacidad reproductiva y sin poder brindar sus importantísimos servicios ambientales como dispersar de semillas o controlar poblaciones de insectos”, reza el comunicado
Por su parte, la Dirección de Fauna informó que, gracias al apoyo de los guardafaunas honorarios, continúa la lucha contra el tráfico de fauna y la concientización de la población a través de diversos medios, "promoviendo la entrega voluntaria de cardenales amarillos y otras especies que se encuentren en cautiverio, lo que no implica ninguna sanción".
Por el contrario, recordó que "si se procede al secuestro de animales silvestres en un domicilio, esto tipifica como delito para la Ley Nacional 22.421, para la ley 14.346 de maltrato animal y es una infracción a la Ley de Fauna Provincial Q2.056 que preveé severas multas, que arrancan desde los 40.000 pesos por cada cardenal amarillo en cautiverio.
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