El viento agita el cabello, el sol ilumina a pleno. Los conductores
de descapotables disfrutan del manejo al aire libre. Y son cada vez
más. En Alemania, por ejemplo, aumentaron los descapotables en circulación entre 2010 y 2017 de 1,71 a 2,12 millones. Nuevos modelos se agregan ahora a este nicho de mercado.

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”Los descapotables le agregan una dosis de emoción a las marcas
automotrices. Son una especie de herederos de los primeros autos de
carrera, que se manejaban abiertos y expuestos al clima”, dice Paolo
Tumminelli, profesor de diseño en la Universidad Tecnológica de

Colonia. Los conductores de convertibles tienen un contacto más
intenso con su entorno natural que los de autos cerrados. “Manejarlos
se convierte en una experiencia originaria de la historia del
automóvil. Hay pocas marcas que se resisten a la tentación de
producir un descapotable”, señala.
Lo que cambió a lo largo de la historia es el valor relativo de los
convertibles. “Al comienzo de la historia automotriz eran más
baratos, hoy son más caros; los cabriolet tienen un carácter más
exclusivo”. También se ha modificado la relación con el confort
habitual de manejo. Los coches abiertos, con fuerte incidencia de la
luz solar, no permiten distinguir mucho en las pantallas que
suministran gran parte de la información de manejo en la actualidad. Tampoco
es fácil comunicarse por voz con el viento y el ruido ambiental
surcando entre las butacas.
Stefan Bratzel, director del Center of Automotive Management de la
Universidad de Economía de Bergisch Gladbach, en Alemania, considera
que el boom de los convertibles ya ha comenzado a declinar. “Un
descapotable permite experimentar una sensación vital de apertura y
diversión, que se traslada positivamente al prestigio de la marca
respectiva, pero la tendencia actual lleva a la búsqueda de mayor
seguridad”, dice Bratzel. En tiempos de incertidumbre, las
preferencias se dirigen en mayor medida a los SUV, autos cerrados en
los que el conductor y sus acompañantes se sienten más protegidos
frente a un entorno inseguro.
A ello se agrega el precio. La mayoría de los cabriolet son derivados
de modelos monovolumen pero su costo de desarrollo es elevado. “La escala de producción reducida hace poco rentable este desarrollo”, dice Bratzel. Por eso se trata en general de automóviles caros producidos por marcas premium, que buscan
posicionarse con mayor prestigio en el mercado.
”Los convertibles son atractivos a primera vista pero, en muchos
casos, no terminan siendo útiles para las necesidades cotidianas”,
dice Marcel Muehlich, del Auto Club Europa. En general, tienen un
maletero pequeño y un espacio interior que no se puede adaptar a
disposiciones diversas. El mantenimiento también puede ser más caro.
”Los cabriolet requieren más combustible que un auto cerrado
comparable, porque son más pesados que los que tienen techo”. La
estructura de la carrocería tiene que ser mucho más estable para
compensar la carencia de techo. Y la resistencia al viento es mayor
en los descapotables.
Además necesitan mayores cuidados: “La estructura del techo
desplazable tiene que ser engrasada periódicamente, la ventana
trasera de material plástico se vuelve opaca con el tiempo y tiene
que ser pulida o cambiada”, dice Muehlich. Las juntas de goma del
techo y su cobertura también requieren de mantenimiento.
Algunas compañías de seguro cobran primas menores por los
descapotables, porque no se utilizan en invierno, al menos no en los
países de bajas temperaturas. De todos modos, suelen ser los
convertibles víctima de actos de vandalismo como un corte de navaja
que arruine el techo. Algunas marcas ofrecen un techo rígido que se
puede colocar en invierno. Claro que hay que montarlo para el frío y
desmontarlo y guardarlo en verano. También existen los convertibles
con techo metálico plegable pero se pierde algo del aspecto clásico del descapotable.
Estos son cinco nuevos modelos de convertible que estarán disponibles
en el mercado en 2018:
ASTON MARTIN DB11 VOLANTE: los ingleses denominan la versión abierta
tradicionalmente Volante. El DB11 dispone de un techo rápidamente
replegable, con un motor V8 de 375 kW/510 CV que lo lleva a poder
acelerar de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos. Alcanza una velocidad
máxima de 300 km/h. Cuesta alrededor de 200.000 euros.
BMW Z4: la automotriz alemana lanzará en el verano europeo una nueva
versión del Roadster Z4. El biplaza deportivo pesará 1,4 toneladas.
Sus motores ofrecen una potencia de entre 135 kW/184 CV y 264 kW/360
CV, con tracción trasera. No se conoce aún el precio de venta.
FORD MUSTANG CABRIO: la leyenda estadounidense llegará también a
Europa en su nueva versión 2018, con un motor turbo de cuatro
cilindros a gasolina con 231 kW/290 CV o un potente V8 de 331 kW/450
CV. Una caja de diez cambios se encuentra entre los opcionales
disponibles para el nuevo Mustang. Su precio: a partir de 43.500
euros.
MINI CABRIO: modifica apenas su modelo de cuatro plazas. El
convertible dispone de luces traseras LED con el diseño del Union
Jack y en forma opcional con caja de doble embrague. Su maletero
tiene una capacidad de entre 160 y 215 litros. El biplaza se ofrece
con motores de entre 75 kW/102 CV y 141 kW/192 CV. El precio: a
partir de 23.300 euros.
MERCEDES CLASE S CABRIO: El Clase S abierto apuesta a ofrecer un
espacio amplio y mucho lujo. Se podrá adquirir con motores V8 o V12
de entre 345 kW/469 CV y 463 kW/630 CV, a un precio que parte de los
143.472 euros.
Fotos: dpa
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