El 27 de diciembre de 2013, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU decidió designar el 31 de octubre como el Día Mundial de las Ciudades, con el objetivo de promover el desarrollo sostenible de las mismas y fomentar la cooperación entre todos los países del mundo para planificar la urbanización de sus ciudades.
Este año el lema de la campaña es “Adaptar las ciudades para la resilencia climática”, ya que, según cifras oficiales, cada vez son más las ciudades del mundo que se ven seriamente perjudicadas por los problemas vinculados con el cambio climático, como el aumento de la temperatura, las inundaciones, las sequías, el derretimiento de los hielos y el deslizamiento de tierras, entre tantas otras graves consecuencias.
De hecho, según un informe de la ONU se estima que en los próximos años al menos 130 ciudades portuarias con más de 1.000.000 de habitantes cada una, se verán seriamente afectadas como consecuencia de las inundaciones costeras.
Italia: 8 ciudades para explorar en bicicleta
Precisamente, uno de los principales desafíos a los que se enfrentan las ciudades modernas es el de generar los medios para resistir ante los desastres naturales que en las últimas décadas se han incrementado notoriamente en los grandes núcleos urbanos del mundo.
Portugal: 5 ciudades para visitar en pocos días
En 2014, ONU Hábitat lanzó una iniciativa a la que llamó “Octubre Urbano”, con la intención de resaltar los desafíos urbanos mundiales e involucrar a la comunidad internacional en el desarrollo de la “Nueva Agenda Urbana” que fue aprobada en octubre de 2016, en la ciudad de Quito, Ecuador, durante la Conferencia de Hábitat III.
“Esta Nueva Agenda Urbana es la brújula para hacer frente a los desafíos de las ciudades en las próxima dos décadas y ha de ser vista como una extensión del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 11 de la Agenda 2030”, reza el escrito.
Dado que, según varios estudios, se estima que la porción de la población urbana mundial aumentará del 55% actual al 70% en 2050, es muy probable que surjan 2.400 millones de nuevos habitantes urbanos en todo el mundo.
La mayor parte de ese crecimiento de la población urbana tendrá lugar en Asia y África, especialmente en China, India y Nigeria.
Por otra parte, a medida que las ciudades existentes sigan expandiéndose y surjan nuevas, se prevé que el consumo de materiales crecerá aún mucho más rápido, lo que representa un gran desafío frente a la escasez de recursos y la intensificación de los problemas ambientales, incluida la contaminación y el cambio climático.
Por lo tanto, acelerar la productividad urbana mediante la reestructuración de vecindarios, la inversión en sistemas de tránsito para toda la ciudad, la reducción de los desechos a cero y el intercambio de recursos, dependerá de la aparición de modos apropiados de gobernanza urbana, que sirvan a los intereses de todas las personas.
También es primordial alentar a las ciudades no solo a innovar y a experimentar, sino, fundamentalmente, a aprender unas de otras para acelerar esta transición, por ejemplo, a través de iniciativas de "ciudades gemelas" o redes de ciudades.
Comentarios