La mundialmente conocida casa de subastas norteamericana, Julien`s Auction tomó por sorpresa a los fans del espionaje mundial al informar que subastará alrededor de 1.500 elementos que fueron utilizados por Estados Unidos, la Unión Soviética y Cuba durante la Guerra Fría que tuvo lugar tras la Segunda Guerra Mundial. Según expresó Darren Julien, director ejecutivo de Julien's Auction, los históricos y valiosos artículos serán puestos a la venta, en vivo y a través de Internet, desde mediados de enero hasta el 13 de febrero.
“Julien's Auctions se enorgullece de presentar la colección más grande de artefactos raros e importantes de la historia de la Guerra Fría que jamás se haya puesto a la venta en una subasta. Desde toda la colección del Museo de Espionaje de la KGB hasta los oscuros artefactos de la carrera espacial de Estados Unidos y la Unión Soviética y elementos nunca antes vistos de Cuba y su Revolución, estos impresionantes objetos ofrecen una mirada fascinante a la agitación geopolítica, económica y cultural de esa época", agregó el empresario.
Entre la amplia variedad de artefactos antiguos que se pondrán a la venta hay desde pistolas que parecen lápices labiales y carteras con cámaras ocultas y dispositivos de escucha soviéticos hasta el mismísimo boletín de calificaciones de la escuela secundaria del revolucionario comunista argentino nacionalizado cubano. Ernesto "Che" Guevara.
En tanto, para los amantes de las armas, la pieza más preciada sin duda es el "Beso de la muerte" que, según un artículo publicado por IFL Science , es una pistola de un solo disparo de 4,5 milímetros con forma de lápiz labial que fue utilizada por las mujeres espías de la KGB en 1965.
Sin embargo, según los directivos de Julien´s el más famoso de los dispositivos soviéticos que pondrán a la venta es la réplica de un arma de jeringa, que fue conocida como el "Paraguas Búlgaro" ya que fue utilizada en el asesinato del disidente búlgaro Georgi Markov, allá por el año 1978.
Más reliquias de la Guerra Fría
En tanto, para quienes siguen negando la llegada del hombre a la luna, la casa de subastas con sede en California subastará un rollo de película de 16 mm. en la que se puede apreciar a los astronautas Paul Weitz y Bruce McCandless vistiendo trajes espaciales en un simulador de gravedad cero.
Entre las reliquias comunistas que más llaman la atención se destaca una máquina de cifrado de códigos Enigma de la Segunda Guerra Mundial conocida como Fialka, así como también una máquina que fue utilizada por los guardias fronterizos para encontrar personas escondidas en los vehículos, una máquina de interceptación telefónica nazi alemana y una puerta de un hospital utilizado por la KGB para asistir a sus agentes heridos.
Adquirida en su momento por el reconocido historiador lituano Julius Urbaitis, la colección también contiene algunos elementos más mundanos que, igualmente, tienen un valor histórico: una cámara diseñada para el vehículo Moon Rover original y una camiseta de la NASA que usó el astronauta Donn Eisele en el Apolo VII.
Esta colección se exhibió anteriormente en el Museo de Espionaje de la KGB en Nueva York, que tuvo que cerrar sus puertas como consecuencia de la pandemia del coronavirus. Por lo que, ahora, Julien´s se hará cargo de la subasta. Si bien el precio base de estos reliquias de la Guerra Fría arranca en unos pocos dólares, la idea de los responsables de Julien´s es que ninguno se venda por al menos de 12.000 dólares.
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