El llamado Magic Bus, o Fairbanks Bus 142, se transformó en un ícono luego de aparecer en el libro “Into the Wild”, de Jon Krakauer. Fue publicado por primera vez en el año 1996 y retratado también en una película homónima del año 2007, dirigida por Sean Penn y protagonizada por Emile Hirsch. Un helicóptero CH-47 Chinook de la Guardia Nacional del Ejército de Alaska removió este jueves el autobús abandonado desde la década de 1940, en una zona identificada como Camino de la Estampida, y en el que murió el protagonista de la novela basada en una historia real: Chris McCandless. El helicóptero transportó por aire al antiguo autobús desde un terreno a poco menos de un kilómetro del Parque Nacional Denali, en coordinación con el Departamento de Recursos Naturales del estado.
La guardia Nacional del Ejército y el alcande de la ciudad cercana Borough consideraron que su permanencia era peligrosa ya que muchos exploradores se adentraban en esa zona remota para llegar a él, y algunos llegaron a perder la vida en el intento o luego de llegar y permanecer en el vehículo.McCandless pasó el verano de 1992 en el autobús y murió de hambre 114 días después.
“Después de estudiar el tema detenidamente, sopesar muchos factores y considerar una variedad de alternativas, decidimos que era mejor retirar el autobús de su ubicación en el Stampede Trail”, dijo el comisionado del departamento, Corri Feige. Entre 2009 y 2017 se efectuaron 15 operaciones de búsqueda y rescate relacionadas con el autobús, dijeron desde el Departamento de Recursos Naturales. En febrero de este año, los soldados estatales tuvieron que rescatar a cinco excursionistas italianos que regresaban de una peregrinación al autobús. Uno de ellos sufrió congelación severa. Turistas de Suiza y Belarús se ahogaron en 2010 y 2019 respectivamente en incursiones relacionados con el famoso bus. Feige dijo que el vehículo se mantendrá en un sitio seguro hasta que las autoridades decidan qué hacer con él, que tal vez sea ponerlo en exhibición.
El film cuenta la historia real de un idealista que dejó todo para vivir en la naturaleza. Abandonado en un paraje inhóspito de Alaska, representa una imperdible atracción para cientos de aventureros conmovidos con la impactante historia de McCandless, quien cambió su vida rutinaria para vivir en la naturaleza y terminó perdiendo dramáticamente la vida en aquel desvencijado vehículo. La historia es tan impactante que impulsa a cientos de personas a hacer el mismo recorrido por el Stampade Trail, un sendero aislado y peligroso junto al Parque Nacional Denali. No hay señal telefónica, el clima es imprevisible y lo cruza el embravecido río Teklanika, que se desbordó en 1992 e impidió que McCandless pudiese buscar ayuda. El joven de 24 años murió de hambre en el bus donde se refugiaba.
La gente con frecuencia atravesaba el parque para llegar al micro, que alguna vez alojó a trabajadores de la construcción que despejaron el sendero para que no se quedasen varados los camiones que transportaban mineral de hierro de una mina, de acuerdo con el libro. Tiene una estufa y literas. McCandless escribió sobre su vida allí durante 114 días, hasta su muerte. Jon Krauker, autor de "Into the Wild'', dijo que se sentía "entristecido y horrorizado'' por las muertes de gente que trata de cruzar el Teklanika. "No sé qué se puede hacer respecto a estos 'peregrinos' que no están preparados, se meten en líos y mueren o deben ser rescatados' -expresó en un correo electrónico a la agencia AP-. No me opongo a que trasladen el bus o construyan un puente si esto va a resolver el problema. Pero me siento escéptico respecto a esas dos propuestas''.
Una hermana de McCandless coincide con él. Carine McCandless cree que, al margen de lo que se decida, la gente seguirá yendo al sitio donde falleció su hermano. Dice que todos los días recibe mensajes de gente de todo el mundo que se identifica con la historia de su hermano y comprende por qué siguen tratando de repetir su viaje. "No siguen los pasos de Chris, sino que escriben su propia historia, por más que no lo entiendan en ese momento' -manifestó-. En cuanto al atractivo del micro, no es el micro lo que los llama. Si fuese trasladado a otro sitio, pondrían alguna marca allí y seguirían yendo al sitio original''. Aquí el momento del traslado:
Fotos: AFP.
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