Thursday 28 de March de 2024
AVENTURA | 27-08-2019 15:09

La ruta de trekking más peligrosa del mundo

En el monte Hua Shan, en China, se encuentra un sendero que invita a los turistas a caminar por trazas muy angostas al borde de precipicios.
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A unos 120 kilómetros de la ciudad china de Xi’an, famosa por los milenarios guerreros de terracota, se encuentra uno de los senderos de trekking más espectaculares y peligrosos del mundo. El monte Hua Shan se destaca por su riqueza natural y por ser una de las cinco cimas sagradas del taoísmo. Además de ello, en su geografía se encuentra una ruta a la que cada vez más personas se animan a desafiar. A través de un paisaje increíble, este sendero de trekking permite subir a cinco picos a través de diferentes caminos. El punto más alto de la travesía es el pico Sur, a 2.610 metros sobre el nivel del mar. A ello se suma la emoción y el vértigo de caminar por un paso sumamente estrecho, al borde de un precipicio.

Su nivel de riesgo es tan alto que se ha ganado el título de la “ruta más peligrosa del mundo”, por lo que cada vez más turistas se acercan hasta Xi’an para probar esta experiencia única. Debido a esto se han adoptado mayores medidas de seguridad, como el uso de arneses, lo que redujo un poco la tasa de accidentes. La ruta cuenta con varios caminos. El más difícil es “el sendero de los soldados”, en el que hay que subir una escalera de casi mil estrechos escalones esculpidos en la piedra. Tras el mismo viene uno de los tramos más conocidos, un angosto sendero construido con tablones de madera que rodea la montaña. Al contrario de lo que la mayoría piensa, la exigencia no pasa por el estado físico, sino por la resistencia mental y la concentración para poder avanzar por una geografía en la que siempre está presente el riesgo de caer desde varios metros de altura.

Más allá del vértigo, durante el trayecto los visitantes también pueden conocer varios templos taoístas. A lo largo de su historia esta zona tuvo una gran relevancia religiosa, ya que es una de las cinco cimas sagradas del taoísmo, junto con Tai Shan, Nan Heng Shan, Bei Hen Shan y Song Shan. Los que desean vivir esta experiencia cuenta con dos opciones: tomar la excursión de un día, en la que el primer tramo se realiza en funicular; o hacer la ruta en dos días, lo que implica pasar la noche en un refugio de montaña.

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