Luego de varios meses de planificación, partimos desde la ciudad de Villa Mercedes (San Luis) a Puelo (Chile), con el objetivo de capturar sus grandes salmones. De la partida fuimos mi padre José, mi tío Ricardo, mi primo Ignacio y quien les escribe, Esteban. Después de recorrer aproximadamente 1.500 km llegamos a nuestro destino final: Puelo, Chile, para ir en busca del salmón chinook. Esta especie transita las correntosas aguas del río Puelo para llegar a su fin, el desove.
Esquel: destino ideal para un safari fotográfico
Pescamos en spinning con cucharas grandes, en pozos profundos con alta densidad de correntada y en modalidad trolling, que fue la que más resultado nos dio, utilizando señuelos de profundidad y media agua. Todos los integrantes de las embarcaciones tuvimos la oportunidad de pelear con estas grandes bestias. Batallas en las que hay que dejar la ansiedad de lado y trabajar inteligentemente para no cometer ningún error.
Uspallata: anfiteatro del Aconcagua
Además de los salmones, Ignacio tuvo la posibilidad de pescar una trucha migratoria (difícil de capturar) que ofreció una hermosa pelea. Todo con su posterior devolución luego de las fotos. En conclusión, es una pesca recomendable para todos aquellos amantes de la naturaleza. Sus barrancas, bosques y cascadas que envuelven el río hacen un espectáculo mientras espera la captura del salmón de su vida.
¿Qué es el desierto florido y cómo se produce?
Texto Esteban Clark - Gentileza Sentí la Pesca.
Comentarios