Quizás un poco más tarde de lo habitual por cuestión de calendario, pero ya salieron los primeros pejes en un punto típico de pesca de playa en el sur de Mar del Plata, como lo es la Arenera del Faro. Es verdad que todavía no explotó, recién hizo sus primeras apariciones, pero mostró algunos pejerreyes de muy buen porte y eso entusiasma a los más fanáticos.

Brótolas, estrellas de la noche marplatense
Todavía hay cuestiones que juegan en contra. Al clima le cuesta mucho acomodarse y el mar no permite pescar. La temperatura del agua todavía no es la ideal (le falta enfriarse bastante) e incluso es habitual ver en varios puntos de la ciudad capturas de burriquetas y de las últimas corvinas rubias. Y para colmo la afluencia de pescadores en el sector es bastante pobre y la zona no está bien cebada.
Sin embargo, el último fin de semana arrojó buenos resultados. En la previa, sin demasiada expectativa, la pesca resultó muy entretenida, sobre todo con ejemplares de medianos a chicos. Varios dobletes y tripletes fueron de la partida y entremezclados algunos escardones que salieron eran de muy buen tamaño. Nada despreciable si se tiene el contexto de transición que muestra la pesca por estas latitudes.

Sigue la chance de los escardones de playa
Es verdad que al pejerrey se lo nota como aletargado y no come para nada bien: de hecho, la mayoría viene apenas enganchado de la boca. Y tampoco pelea como lo hace la especie habitualmente en el mar. Muchos pescadores que no vieron el pique a tiempo se sorprendieron cuando trajeron más de una captura prácticamente sin darse cuenta.
Para aquellos que gustan de la pesca a la cantidad es una muy buena opción, incluso para los que buscan entretenerse. Los de mejor porte mostraron que la pesca está y que será cuestión del clima permitir o no que la temporada sea exitosa. A juzgar por los primeros muestreos, el pejerrey está y el entusiasmo por la temporada 2024 es alto. El viento, la lluvia y el mar serán entonces determinantes. Todavía todo está por verse.
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