Es tanta la generosidad que le ofrece el Río de la Plata al pescador, que hasta nos da la posibilidad de elegir las especies por las cuales uno intenta armar la salida. Es sabido que en este momento del año podemos encontrar bagres de mar, corvinas, patíes, gran diversidad de variada y dos de las especies más combativas, como son la boga y el dorado. Y a estas dos últimas apuntamos en nuestra visita a Berisso, sabiendo que las bogas volvieron a poblar los malecones y los dorados ya comenzaron a tomar los artificiales.
50 ámbitos para el pejerrey
Al margen de la violencia de los piques que ejercen estas especies, también las elegimos porque son perfectamente complementables, actuando con el río en bajante para intentar con la boga, y cuando toma fuerza con la creciente volcarnos a la pesca de dorados.
En toda la zona también se pueden efectuar pescas de costa con diferentes resultados. Teniendo en cuenta que son riberas planas y muchas veces la bajante aleja bastante el agua, habrá que arrojar muy lejos nuestro aparejo o bien entrar al agua y probar desde allí.
50 lagunas con buenos pejerreyes
Nosotros optamos por la pesca embarcada. Y para organizar nuestra salida llamamos al guía Matías Pavoni, especialista en estos dos tipos de pesca. Los contactos se fueron sucediendo casi diariamente buscando el día que estuviera menos ventoso para poder pescar tranquilos en la zona de los malecones.
Nota publicada en la edición 495 de Weekend, diciembre de 2013. Si querés adquirir el ejemplar, llamá al Tel.: (011) 4341-8900. Para suscribirte a la revista y recibirla sin cargo en tu domicilio, clickeá aquí.
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