Desde la zona sur del Gran Buenos Aires, astillero Navegar suma el octavo modelo a su ya conocida gama de embarcaciones. En este caso, un bote tipo panga pero de pequeño tamaño, muy cómodo para ser transportado en tráiler y desembarcar en cualquier playa, laguna o río.
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Exterior
El perfil del bote responde a la línea de la gama del astillero, con un arrufo marcado y bien lanzado a proa, y un quiebre en ambos extremos, a popa y proa, que le da mayor altura para tener un francobordo más seguro. El casco posee un diente en todo su largo, ubicado a mitad del costado, con una pequeña elevación en proa. Este salto le otorga una mayor rigidez al panel y amplía la manga superior en el interior, sin agregar mucha más en el fondo, lo cual reduce la fricción y el consumo.
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En la parte superior, la cubierta posee una forma de líneas rectas y amplias en la zona proel, con quiebres facetados bien marcados, lo que genera una especie de plataforma allí. Su buen puntal de 0,75 m le garantiza una altura de seguridad aceptable, y evita cualquier ingreso de agua dentro de su zona de navegación habilitada. La proa, en la roda superior, posee una forma plana triangular, con un cáncamo de amarre y una manija de sujeción superior que puede oficiar como cornamusa. Esto garantiza la comodidad en el desembarco desde ese sector cuando encallamos de proa.
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Interior
Al ingresar, sus 4,90 m de eslora por 1,64 m de manga se hacen notar, ya que todo el interior está prácticamente libre, sólo posee dos sectores matrizados: uno de ellos está en proa y tiene una gran plataforma sobre nivel con un tambucho de guarda compartimentado y estanco por medio de una tapa. A popa, la matricería posee un diseño más elaborado con un sector para guarda del tanque de combustible portátil sobre la crujía, el cual por medio de una tapa queda oculto, generando un asiento entero de banda a banda. Culmina en ese sector el balde porta motor y dos pequeñas plataformas de baño que rodean al balde, no muy común en este tipo de botes de poca eslora, donde también se ubican dos cornamusas.
La altura de la zona del balde portamotor es la adecuada para instalar el motor propulsor fuera de borda con sistema de dirección y aceleración de caña. En el área del centro del bote, todo el piso es completamente estanco, con un pintado gris y salpicado prolijo. Por último, en la parte central se adiciona un asiento tipo tabla, que junto a dos cuadernas reforzadas otorgan una mayor rigidez a todo el sector del costado del bote. Si bien posee una buena estructura, su peso de 175 kg hace que sea fácilmente transportable e ideal para usarlo en lagunas, ríos o costas, ya que se lo puede remolcar con cualquier vehículo. Como opcional, el astillero ofrece la posibilidad de instalar una consola con mando a distancia, toldilla y portacañas.
Navegación
Este nuevo Malecón 490 posee un fondo casi plano en popa, con forma de “M”, que garantiza un bajo consumo debido al menor arrastre generado y al uso de poca potencia para el planeo. A proa, la “V” se hace más marcada y genera una navegación franca en oleaje chico, pero se resiente cuando crece en altura, producto de su diseño de fondo típico, similar al de todas las pangas o truckers.
De buena maniobra, buen viraje sin derrape y velocidades lógicas para un producto de este tipo,
pudimos probar el equipo con un motor Yamaha de 25 HP de dos tiempos. Las velocidades alcanzadas superaron los 25 nudos de máxima, con tiempo al planeo próximo a los cinco segundos.
Sin dudas, este nuevo producto de astillero Navegar ofrece muchas alternativas para un usuario que busca una embarcación simple, transportable y de muy bajo consumo, o un auxiliar para una embarcación de mayor porte.
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