Mientras se encontraban disfrutando de un habitual día de pesca en el río Carcarañá, a la altura de la localidad santafesina de Pueblo Andino, una familia de tres pescadores se encontró con un botín inesperado: la parte superior del cráneo de un prehistórico mastodonte, con una dentadura de unos 50 a 60 centímetros de largo y un peso aproximado de 30 kilos, cuyos dientes tienen entre 5 y 10 centímetros cada uno.
“Estábamos pescando y, de pronto, vimos cerca del agua una punta de diferente color enterrada en la arena. Se nos dio por escarbar y tocamos dientes”, relató Milton Amúa, uno de los afortunados pescadores, al portal “11 Noticias”, de la ciudad santafesina de San Lorenzo.
Tras informar oficialmente del hallazgo a las autoridades policiales de la zona, los pescadores aceptaron entregar los restos fósiles que habían encontrado a las autoridades del Museo Paleontológico “Tito Zuddas” de Pueblo Andino, para que sean sometidos a los estudios pertinentes que permitan determinar si en verdad pertenecieron a un mastodonte y su antigüedad exacta.
“Si bien a muchos puede llamarle la atención este hallazgo, no es el algo raro, ya que cada tanto en el río, como sucede en todos los inviernos cuando el agua baja y la barranca va cediendo, suelen aparecer toda clase de objetos extraños”, comentó, por su parte, el jefe comunal José Abraham al diario La Capital de Santa Fe.
Por su parte, según relató Néstor Trivero, integrante de la Comisión Comunal local, lo que más les llamó la atención es que “la mandíbula tiene 4 molares intactos, muy bien conservados. Hasta creemos que tiene los orificios donde irían los colmillos”.
“En un primer momento, estos muchachos, que no son más que pescadores ocasionales, se los habían llevado, pero cuando nos comunicamos con ellos aceptaron entregarlos, no como mucha gente que viene a Andino a pescar y se lleva piezas de estas características, pero menores, como recuerdo”, agregó Trivero.
Si bien todavía no se pudo precisar con exactitud la antigüedad de los restos fósiles hallados, según se sabe, la extinción de los mastodontes de la faz de la Tierra habría tenido lugar hace entre unos 8.000 a 10.000 años atrás.
Esta especie surgió en Eurasia en el período del Oligoceno, hace unos 23.000.000 de años, y con los años se fue extendiendo por África y, también, por América, donde, según varios estudios, habitó hasta principios del Holoceno.
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