El 26 de mayo de 1906 el ingeniero y diseñador de aviones alemán August Franz Max von Parseval se convirtió en la primera persona del mundo en realizar la primera ascensión a bordo de un dirigible no rígido. La aeronave de 48 metros de longitud contenía 2.500 metros cúbicos de gas y estaba dotada de 90 cv. de potencia.
Nacido el 5 de febrero de 1861 en Frankenthal, Palatinado, Alemania, Parseval fue un pionero tanto en la aeronáutica y en la aeroestación, como así también, en la fabricación y en el diseño de globos dirigidos y atados.
Estudió en la Academia Militar de Múnich hasta 1879 y, luego, fue admitido como cadete en el Regimiento de Infantería Prinz Carl von Bayern, el cual abandonó en 1907, tras alcanzar el rango de Mayor.
Apasionado por los misterios de lo más pesado que el aire, se sumergió en la teoría del mecanismo de las alas de los pájaros y se dedicó al estudio de la tecnología de las aeronaves. Mientras su colega Ferdinand von Zeppelin avanzaba sobre los globos de carcasa rígida, Parseval desarrolló modelos de chaqueta flexible que cubrían endurecidos por la presión interna del gas de inflado (tipo globo Blimp o bolsa blanda).
Con la valiosa ayuda del ingeniero Rudolf Hans Bartsch von Sigsfeld, en 1898 Parseval desarrolló el Drachen, un novedoso modelo de globo de observación militar cautivo que estaba provisto de una góndola. Apodado “salchicha” por los aliados debido a su particular forma cónica, ese material se utilizó ampliamente en el frente para la observación de artillería durante la Primera Guerra Mundial.
Finalmente, en 1901, Parseval comenzó a trabajar en el diseño de una aeronave motorizada que si bien era de dimensiones pequeñas, gracias a las mejoras que introdujo en la tecnología de sus motores, el 26 de mayo de 1906 le permitieron lanzar el primer dirigible experimental.
Aprovechando este gran impulso, Parseval desarrolló cerca de unos 20 modelos más sofisticados de aeronaves flexibles, con un tamaño y alcance restringidos, muchos de los cuales, tras ser aprobados para su uso militar, fueron fabricados en masa para su uso en las misiones de vigilancia costeras y antisubmarinas.
Tras la Gran Guerra, el inventor alemán llegó al final de su evolución tecnológica desarrollando cuatro modelos de aeronaves con carcasa semirrígida. Del tipo Parseval-Naatz (llamado así por el ingeniero Hermann Naatz que diseñó los planos en colaboración con Parseval), estos globos civiles fueron utilizados tanto para el transporte de pasajeros como también para las primeras publicidades aéreas.
La robustez y la gran fiabilidad de las máquinas creadas por Parseval siguen utilizándose hasta el día de hoy. Su tecnología se exportó a todo el mundo dando lugar a cientos de globos, muchos de los cuales fueron fabricados bajo licencia por la reconocida firma estadounidense Goodyear.
Entre 1912 y 1936, August von Parseval estuvo a cargo de las cátedras de Construcción de Aviones y de Ingeniería Aeronáutica en la Escuela Técnica Superior de Charlottenburg, falleciendo el 22 de febrero de 1942, en Berlín.
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