Más de un centenar de bomberos voluntarios y brigadistas siguen trabajando contrarreloj para tratar de extinguir el incendio forestal que se desató el pasado fin de semana en la zona de las Yungas, en la provincia de Jujuy, y que ya consumió más de 6.000 hectáreas, según informaron desde el gobierno provincial.
El gran temor de las autoridades y de los brigadistas es que el fuego se pueda extender sobre el Parque Nacional Calilegua, con todo lo que ello implica para la fauna y flora que hay en esa inmensa reserva natural jujeña de 76.300 hectáreas de superficie.
“La lucha contra el fuego llevará varias semanas más, por las condiciones climáticas y por la dispersión de los focos”, señaló el gobernador jujeño, Gerardo Morales, tras reunirse con el Comité Operativo de Emergencia (COE), que se constituyó en la localidad de Caimancito.
“Están trabajando coordinadamente todos los ministerios y organismos de la provincia, con el aporte de los municipios de Caimancito, El Talar, Fraile Pintado, Libertador General San Martín, Yuto y de Vinalito”, agregó el mandatario jujeño.
El operativo también cuenta con la colaboración del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, de Parques Nacionales, de Defensa Civil y de varias dotaciones de Bomberos Voluntarios de distintas ciudades de Jujuy.
Teniendo en cuenta las condiciones climáticas adversas, Morales anunció que están evaluando la urgente incorporación de helicópteros al operativo.
“Lamentablemente, no colabora el clima, por lo que se puede complicar la situación en algún día puntual de esta semana. Además, la zona es de difícil acceso para los brigadistas”, manifestó.
Al ser consultado sobre las causas que habrían originado estos focos de fuego que están arrasando la zona de la Yunga, el gobernador jujeño afirmó que “está claramente establecido que fue intencional y que comenzó en una finca privada. Lo difícil es encontrar al responsable”.
“Sabíamos que la situación se podía complicar por la sequía y por los efectos del incendio ocurrido en 2020 que fue más complicado con 24.000 hectáreas quemadas, dejando masa con capacidad para generar fuego. Si bien en este caso ya son más de 6.000 las hectáreas quemadas, estamos redoblando todos los esfuerzos para que el fuego no se extienda al Parque Nacional Calilegua”, concluyo Morales.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de Jujuy informó que un equipo de veterinarios ya se encuentra en las localidades de Ledesma y Yuto para atender a la fauna nativa, en tanto que equipos técnicos de rescate se encuentran realizando rastrillajes con el objetivo de detectar si hay animales afectados por el fuego.
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