Tras dos largos años y medio de arduos trabajos e investigaciones, finalmente, Space X lanzó al espacio su poderoso cohete Falcon Heavy 9, cuya misión es poner en órbita múltiples satélites, entre ellos, el Starlink 4-31.
Según informó la NASA en su página web, el lanzamiento del megacohete de la empresa de estadounidense de fabricación aeroespacial y de servicios de transporte perteneciente al multimillonario empresario norteamericano Elon Musk fue lanzado desde el Complejo de Lanzamiento 4E de la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg, California, EE.UU.
Para poder llevar a cabo el lanzamiento del Falcon Heavy 9 se utilizó el propulsor B1063-8 que aterrizó, con éxito, en el ASDS Of Course I Still Love You, un barco que sirve como plataforma de aterrizaje de SpaceX, ubicado a 672 kilómetros de distancia, en el océano Pacífico.
En tanto que, los expertos afirmaron que la segunda etapa alcanzó la órbita antes de desplegar los 53 satélites, 15 minutos antes del lanzamiento.
Compatible con los requisitos que la Fuerza Espacial de Estados Unidos exige para la misión USSF-44 con la que buscarán lanzar dos satélites a la órbita geoestacionaria distante, el Falcon Heavy 9 es el cohete operativo más poderoso del mundo, gracias a sus 27 motores Merlin que son capaces de proporcionar más de 2.200.000 de kilogramos de empuje en el momento del despegue.
"Con la capacidad de poner en órbita casi 64 toneladas métricas, Falcon Heavy puede levantar más del doble de la carga útil del siguiente vehículo operativo más cercano, el [United Launch Alliance] Delta IV Heavy", concluyeron desde la NASA.
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