Rige la veda total de pesca en el río Uruguay

Este miércoles, con la publicación en el Boletín Oficial de Misiones, se oficializó la vigencia de la veda total de pesca tanto deportiva como comercial y en todas sus modalidades (costa, embarcado a remo y embarcado a motor) en el río Uruguay y sus afluentes en aguas jurisdiccionales de la provincia. La medida regirá hasta la medianoche del miércoles 31 de enero de 2024.

De acuerdo a la Resolución 293/2023 del Ministerio de Ecología, el objetivo es proteger a las distintas especies en su periodo de reproducción que transcurre en esta época del año. Queda excluida de la medida restrictiva la pesca de subsistencia, entendiendo por ella a la "practicada por el pescador desde la costa con línea de mano, destinada a su consumo y al de su familia, prohibiendo totalmente la comercialización de dicho producto". Para ello, igualmente, se deberá contar con los correspondientes permisos emitidos por dicho ministerio.

La medida se toma debido a que por "las bajantes extremas del río Uruguay que acontecieron en los últimos años las poblaciones de las especies de interés comercial y deportivo fueron afectadas, por lo tanto, es necesario establecer la extensión de la temporada de veda para sostener la reproducción y la restauración de los ecosistemas". En relación a ello, se menciona que "recientes informes técnicos ambientales de instituciones que monitorean la fauna íctica en toda la cuenca del río Uruguay, tanto de Argentina, Uruguay y Brasil, se observó la disminución significativa de peces juveniles de especies como sábalo, surubí, boga y dorado, entre otras. Por lo que, si se tiene en consideración que los peces demoran, aproximadamente, 2 a 4 años en alcanzar la madurez, se puede predecir un déficit de individuos nuevos que se incorporen al stock de reproductores en pocos años".

Se alerta además que "no solo las grandes especies de peces se ven afectadas, sino también las especies de menor porte, pero de gran valor ambiental dentro del ecosistema del río Uruguay", refiere en ese marco a algunas que "son endémicas del denominado 'Uruguay superior', como por ejemplo la Tararira (Hoplias australis) que se encuentran exclusivamente en esta parte del río. También especies de cíclidos (chanchitas y juanitas) cuya distribución es única para esta región, son de interés para su protección ya que muchas son insuficientemente conocidas". 

Esta resolución de protección de la fauna íctica se dicta en simultáneo por el Instituto Brasileño de Medio Ambiente, por lo cual ambas orillas manejan la misma normativa, una gran noticia para que se realice correctamente la misma y con un mejor control.