Necochea es uno de los destinos más elegidos en la temporada estival, con rendimientos pesqueros superlativos durante todo el año, pero con un pique que se afirma a partir del mes de octubre. Tanto desde la playa como en las escolleras tenemos la chance de dar con muy buena variada.
Domingo de pez gallo en las playas de El Cóndor
Promediando la semana pasada nos llegó la noticia de la aparición de las palometas, una especie que es un imán para los aficionados y que, una vez que aparece, mueve muchísimos pescadores hacía la escollera o aguas arriba del río Quequén Grande, donde remonta la especie hasta inmediaciones al puente caído. Tanto con carnada, pescando con tiras de pejerrey, como con artificiales clásicos como cucharas, hasta con los sabikis, esas líneas con plumitas que se han puesto de moda en el último tiempo, las capturas fueron muy abundantes y se mantienen hasta el cierre de esta nota.
Otra buena noticia fue la aparición de las corvinas rubias, muy esperadas y que se empezaron a dar. Los amantes de la pesca liviana, disfrutan en la escollera de Quequén, de sauros, pescadillolas y corvinotas. Además, hay momentos de buenas pescadillas, principalmente en las noches, y los peces elefantes, que tuvieron una importante irrupción días atrás, pero siguen capturándose.
Stefano Caresia fue uno de los tantos tandilenses que se acercaron a la zona en los últimos días, recorriendo varios pesqueros y logrando corvinas rubias como pescadillas de noche, pescando con langostinos, mientras que de día disfrutaron de abundancia de pescadillas, con ejemplares de todo tamaño, sumándose palometas pescando al vuelo con filet de pejerrey bien rebajado.
Lo que viene, es lo mejor. Necochea tiene servicios acordes para disfrutar en familia y una riqueza íctica que nos permite, tanto de costa como embarcados, disfrutar de buena pesca. Prometemos seguir mostrando las bondades de una ciudad que tiene buenos piques.
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