La pesca de dorados con artificiales lo magnifica todo, más aún con un equipo ultrasensitivo como lo es uno de fly. En este caso utilicé una caña n° 8 con línea sinking tip (flote con punta de hundimiento), con un leader trenzado de 5 pies. El equipo debe ser justo, ni sobrar ni faltar potencia, para tener resistencia a lo largo de la jornada, de esta forma podremos mantener la precisión durante todo el día, esperando la clavada de alguno de esos colosos que te hacen estremecer y te llenan de adrenalina.
Estos maravillosos tesoros que todavía resguarda nuestro generoso río Paraná, nuestros lingotes de oro, los dorados, se presentan a quienes saben cómo, dónde y cuándo buscarlos. En esta oportunidad salimos con guías baqueanos de Goya, Corrientes, la operatoria El Gordo y el Flaco, donde además de tener esos conocimientos de expertos guías, con excelente servicio y dedicación, te acercan a los mejores pesqueros de la zona.
Claves de la pesca
“Mosca fresca siempre pesca”, haciéndole honor al dicho até un streamer de unos quince centímetros aproximadamente con saddle pro neon purple, un poco de brillo, Predator fibers negro y Craft Fur del mismo tono, todo con productos Feathers & Flies. Siempre es bueno tomarse el tiempo de ver dónde estamos parados, contemplar, respirar profundamente y conectar con el presente para poder dar con tus sueños, poniendo fe en que siempre se nos puede dar.
Truchas soñadas en San Martín de los Andes
Pesca con mosca: cómo atar una ninfa
En este viaje fui anhelando y pidiendo al río Paraná un dorado grande, una batalla épica para que pudiera coronar mi salida. Al hacer buen equipo con mi compañero y el guía, se formó un ambiente lindo, apacible, donde poder disfrutar de este maravilloso deporte tan sano.
Ya tocando las últimas horas del día y con la presión atmosférica bien baja, sentíamos esos momentos previos a la tormenta, a sabiendas de que justamente ese es el clima que normalmente regala trofeos, con las manos ampolladas de haber empuñado la caña durante tres largos días de pesca.
El dorado de la jornada
Richard, el guía, seguía alentándome: “Vicky entramos en zona de barrancas, ¡dale que sale a vaca!”. Súper ansiosa y trabajando sobre mis nervios, comencé a meter todos los tiros pegados a la barranca, al escuchar las cacerías y ver los movimientos en la superficie, mi estómago había entrado en shock; ¿cómo concentrarse ante seméjate festín audiovisual?
En uno de esos flashes de concentración logré poner foco a lo que estaba aconteciendo para ver que a la natación de mi streamer le seguía una ola inmensa saliendo de la barranca, casi en modo automático, pique clavada y corrida, ¡BOOM! Todo junto, explotó el agua y el dorado dio un salto de medio cuerpo. Era grande, muy grande.
De ahí en adelante, chau Vicky, me perdí con solo ver eso, rezando para que todo salga bien, manteniendo la presión de la línea y con mis brazos ya cansados, aterrada de que algo pudiera salir mal. Llevábamos más de veinte minutos de pelea, esa belleza no se quería dejar vencer, después de varios intentos y algunos minutos más, por fin entró al copo. Definitivamente era mi día de suerte, ya que ni bien perdió la tensión de la línea, vi que de su boca se desprendía el streamer, qué lindo y difícil es dar con los más grandes. No es fácil vencer a quien nunca se rinde, por eso nunca dejes de soñar.
Agradecemos a Vicky Ahumada por su colaboración y la asistencia de Roberto Galbarini, Richard, de El Gordo y el Flaco, y Feathersnflies.
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