Clubes de pesca despidieron el año con encuentros y concursos

El Concurso a la Pieza Mayor para medios de prensa 7° fecha de la Copa Challenger “Rodolfo Perri” (destacado periodista de Weekend y socio del Club de Pescadores), se desarrolló el viernes 24 de noviembre entre las 20:00 y las 23:00 en el legendario muelle del Club de Pescadores, próximo a cumplir 120 años. La convocatoria a la que estuvieron especialmente invitados, quienes habitualmente informan sobre esta actividad, les dio la posibilidad de compartir un agradable momento entre camaradas de la comunicación y, de paso, poner al día sus habilidades pesqueriles, en este caso en la modalidad de fondo con líneas de hasta dos anzuelos.

Vale destacar que esta institución representativa del “deporte del silencio” es la más antigua de Sudamérica. Su inconfundible silueta, que engalana la costanera, dispara la curiosidad de los turistas que desde el aire al arribar a Aeroparque se encuentran con un castillo belga flotando sobre un muelle. El encuentro, que comenzó puntualmente, tuvo a un fuerte viento del sudeste como invitado especial dejando solamente un lado del muelle como sector para tirar las líneas. Esta característica climática hizo prácticamente nula la pesca de carpas y bogas, las cuales suelen comer mejor con aguas más calmas, por eso los siluros fueron los únicos peces que llegaron a la fiscalización. Utilizamos línea de un solo anzuelo con una plomada de 50 gramos encarnada con lombriz, también probamos con posta de sábalo, grasa de cerdo sazonada y granos de maíz saborizados. estas últimas sin ningún resultado.

Costó llenar la planilla, las capturas eran esporádicas y, en general, de piezas pequeñas. Con el viento identificar el pique fue incierto y, a veces, clavábamos con entusiasmo una bolsa o alguna madera que al pasar arrastraba el aparejo simulando un pique. Sin embargo, el encuentro fue pura alegría: se festejaba entre aplausos y bromas cada captura de cualquier participante como propia. Transcurría la noche y, de a poco, se cerraba el concurso que nos dejaba en un decoroso sexto puesto.

El presidente de la institución, Pablo Llaver, fue el maestro de ceremonias durante la entrega de premios y los sorteos de elementos de pesca. Simultáneamente, unas pizzas riquísimas nos devolvían el alma al cuerpo. Los ganadores fueron: en categoría damas, Susana Méndez; en caballeros, Gonzalo Garbea; en la categoría prensa, Ramón Lezcano de Puerto de Pescadores radio, Jorge Alonso y Luis Belvisotti, en segundo y tercer lugar respectivamente, representando al programa Pesca Visión, por su parte, Roberto Lagorio del Boletín del Pescador Radio se colocó en el cuarto puesto, y el quinto lugar fue para Fernando Diéguez de Puerto Pesca.

El 1 de octubre el Club de Pescadores Olivos cumplió 83 jóvenes años y para festejarlo llevó adelante su clásico Torneo Aniversario, el domingo 13 de noviembre a partir de las 8:30 en la modalidad de fondo caña de una mano. Esta institución enteramente dedicada a la pesca deportiva fue fundada en 1939 y, en principio, utilizaban como espacio para tirar las cañas el morro del puerto, hasta que en 1976 se concretó la primera etapa del actual muelle, logrando internarse en el río unos 150 metros. Más adelante, por el año 1989, se completó la estructura actual que en total tiene 300 metros de largo, amplias parrillas y quinchos cubiertos, solarium, buffet, baños, iluminación para la pesca nocturna en todo su perímetro y un refugio con baño sobre el ingreso al morro.

El Club de Pescadores de Olivos está ubicado a poco más de 15 kilómetros de Capital Federal, al final de la calle Alberdi que bordea el puerto y a la izquierda del canal de acceso a este puerto y del ingreso al Yacht Club; posición geográfica que siempre lo dejó bajo la mirada de operadores inmobiliarios con intereses comerciales, que en más de una oportunidad intentaron quedarse con este espacio.

Pero regresemos a la pesca, que para ponerle un grado más de dificultad se sumó el viento, la llovizna y el frio, una constante durante todo el certamen. Vale aclarar que esta pesca competitiva contempla hasta los mínimos detalles, y los equipos se afinan al máximo para lograr piezas pequeñas que sirven para sumar puntos y así ir avanzando en el planillero.

Las técnicas a aplicar marcan la diferencia, por eso sentir el pique de minúsculos bagres, porteños y patíes en estas circunstancias se hace casi una ciencia exacta. El tiempo también es esencial para estos especialistas, quienes después de unos minutos vuelven a recoger las líneas para hacer un nuevo lanzamiento, cambiando carnadas y buscando llegar a un nuevo lugar que, tal vez, tenga una captura a la espera.

Una vez lograda la pieza se mide y se devuelve de inmediato al agua, sea cual fuere la especie, haciendo de este encuentro una competencia totalmente deportiva. Si el concurso se llevaría a cabo con el clima de hoy, seguramente el catálogo de especies sería un poco más amplio, con buenas carpas, bogas y tal vez con algún doradito de esos que siempre se arrima al muelle en busca de mojarras. ¡Ah! y tal vez algún pejerrey distraído. Los ganadores fueron: en categoría damas, Analía Villar del Club de Pesca Guazú; en Seniors, Bernardo Doval del Club de Pesca Olivos y en Mayores Tomas (canutito) Ubertone de la Peña Pira Caru con 263 puntos.

Estas fueron las breves y necesarias crónicas de dos divertidas competencias, que transparentan el valor deportivo y humano de la actividad de la caña. Despedidas de año ideales, de prestigiosas instituciones que aguardan un 2023 con mayor esperanza y mejores piques.