Como todos los años, cuando promedia el mes de diciembre, los pescadores estamos ansiosos por conocer cómo será la pesca de las reinas del Plata. Por eso, junto con el guía Sebastián Ronin y Fabian Calderón, decidimos relevar este fabuloso pesquero conformado por piedras y palos que da origen al nombre de malecones. Allí en el fondo habitan colonias de mejillones que son el alimento preferido y natural de las bogas.

Los últimos pejes platenses de la temporada
Decidimos hacer una corta jornada de pesca por la tarde para ver si teníamos éxito con esta especie. Aprovechando una buena marea y con fuerte bajante, nos atamos a los palos y practicamos la pesca de bogas empleando equipos de pesca muy livianos con cañas de 15 libras, pequeños reeles rotativos del tipo huevito o frontales, aparejo de dos anzuelos bogueros número 2 y plomo de 60 gramos del tipo palito que se engancha menos.
Rápidamente tuvimos respuestas de bogas de muy buenos portes que picaban en nuestras carnadas. Se llevó las palmas el maíz remojado en vainillin, solo había que poner 1 o 2 maíces para no perder tanto pique. También rinden los daditos de salamín o los harinados GR, formando una masa dulce con esencia de vainilla.
En tan solo 3 horas de pesca, obtuvimos varios ejemplares de buen porte, lo que significa que estamos en presencia de una muy buena temporada de esta especie. Otra alternativa posible son las grandes carpas y, de yapa, la chance de dorados con señuelos está espectacular, ya sea en arroyos interiores como en los malecones con la marea creciente.
Sin dudas, la fuerte creciente de los ríos Paraná y Uruguay está trayendo mucha agua con grandes bogones, tornando un gran momento para visitar Berisso e ir por las capturas que pueden alcanzar los 4 kilos de peso, en una pesca que hará estremecer las chicharras de los reeles.
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