Desde hace varias semanas los vecinos del balnerario El Condor, Río Negro, están muy preocupados ante la llamativa cantidad de loros barranqueros que aparecieron sin vida tanto en los campos como en los caminos de la zona. El mencionado balneario se encuentra ubicado a unos 30 kilómetros de La Lobería, donde se encuentra la mayor colonia de loros barranqueros de todo el mundo, con una población que ronda los 200 mil ejemplares.
Si bien, según informaron las autoridades policiales locales hasta el momento se han contabilizado poco más de 250 de estas aves muertas por motivos que todavía no se pudieron establecer, los vecinos del lugar advierten que, en realidad, el número de loros que perdieron la vida superaría ampliamente el millar.
Según los especialistas, la principal razón de la mortandad podría radicar en la falta de alimentos debido al fenómeno climático de La Niña, que ocasionó una excepcional sequía en la zona ya que los años caracterizados por la ocurrencia de este fenómeno climático presentan precipitaciones con reducciones considerables lo que, consecuentemente, determina que la productividad primaria caiga en forma significativa. Pero tampoco descartan la posibilidad que haya ocurrido en los partidos vecinos de Patagones y de Adolfo Alsina.
“El evento de mortandad que estamos presenciando nos preocupa mucho, y he dado claras instrucciones a todo mi equipo de avanzar con todos los medios disponibles para poder llegar a un diagnóstico, con bases científicas, de lo que está ocurriendo, que nos pueda poner a todos en conocimiento de que es lo que está sucediendo con nuestra colonia de loros barranqueros, la más grande del mundo”, expresó Dina Migani, secretaria de Ambiente y Cambio Climático.
De acuerdo a los registros históricos del Equipo de Investigación que se encuentra trabajando en el lugar desde el año 1998, si bien es normal en esta época del año que se observen ejemplares de “volantones”, que son pichones nacidos en noviembre y recién salidos del nido, y que, ante su inexperiencia sucumben por diferentes causas como predadores, baja alimentación o atropellos de fauna, a diferencia de otros años, “en esta temporada se observa una elevada mortalidad de individuos adultos”, dice el escrito.
Por su parte, para el reconocido doctor en biología Juan Masello, quien encabezó un estudio realizado entre diciembre de 2020 y en los primeros días de 2021 junto a un equipo de la Justus-Liebig Universität de la ciudad de Giessen, Alemania en el marco de un convenio con la Secretaría de Ambiente de Río Negro, en esta temporada se ha observado “una alta mortalidad de individuos adultos, la cual preocupa con mucha razón a los vecinos y funcionarios y a la que debemos encontrarle la verdadera causa que la produjo para obrar en consecuencia”, manifestó.
En tanto, desde el gobierno local, instaron a la población a que no recoja los cadáveres de los loros sin guantes porque las aves pueden contagiar psitacosis y, ante cualquier duda llamar a Defensa Civil (103) o a Fauna (2920612000).
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