Mientras realizaban tareas de excavación en el cerro del Espíritu Santo, ubicado en Vera, Almería, España, un equipo de arqueólogos de la Universidad de Granada (UGR),descubrió parte de la antigua ciudad de Bayra que había sido arrasada por completo por un voraz terremoto que tuvo lugar en el año 1518.
Según informó la mencionada casa de estudios española a través de su página oficial, los investigadores descubrieron gran parte de las estructuras de la alcazaba de la ciudad, entre las que se encontraban la entrada de la misma, varios complejos estructurales de ámbito doméstico y materiales arqueológicos de distinta índole que están siendo analizados pormenorizadamente por parte de un grupo multidisciplinario.
“La dimensión de los hallazgos es significativa, superando algunos tramos de muro de las viviendas excavadas los dos metros de altura. La excavación ha consistido en cinco sondeos arqueológicos en diferentes puntos del cerro”, explicó Alberto García Porras, profesor del Departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas y autor principal de la investigación.
“El estudio está en pleno proceso, ya que estamos desarrollando todos los trabajos de laboratorio y gabinete pertinentes, a la espera de poder difundir los resultados obtenidos”, agregó el especialista que contó con la ayuda del arqueólogo y doctorando de la UGR Moisés Alonso Valladares, del técnico Nicolás Losilla Martínez y de la arqueóloga Carmen Sánchez Castillo.
Bayra: una ciudad con mucha historia
La ciudad medieval de Bayra, cuyo origen data del siglo IX fue destruida por un terremoto en 1518 y se levantaba en el cerro que actualmente se lo conoce con el nombre de Espíritu Santo.
La ciudad estaba conformada por un cincho de murallas de tapial que rodeaban a media ladera el mencionado cerro con diversas torres y una alcazaba que se ubicaba en la parte más alta. Si bien la ciudad se distribuía en el interior del recinto amurallado, sobre el cerro, la mayor parte de las viviendas se ubicaban en dos arrabales extramuros.
Enclave fundamental en la época nazarí, la última frontera del reino ocupada por el ser humano desde la época de los fenicios, fue arrasada por completo por el voraz terremoto del año 1518, obligando a todos sus habitantes a tener que abandonarla, antes de que, literalmente, se la tragara la tierra.
Según afirmaron los arqueólogos esta hallazgo les permitirá conocer mucho mejor cómo vivían los habitantes de Bayra hace más de 500 años, como, así también, determinar cuáles fueron las verdaderas consecuencias del terremoto que al día de hoy siguen siendo una gran incógnita para la comunidad científica española y mundial.
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