La NASA anunció oficialmente que está llevando a cabo un exhaustivo estudio sobre vuelos supersónicos con el objetivo central de que, en el corto plazo, los viajes comerciales puedan tardar hasta un máximo de cuatro veces menos que el tiempo que demandan los vuelos actuales.
“Estamos estudiando si en el futuro podrían despegar vuelos comerciales de hasta Mach 4, es decir, a más de 4.830 km/h, y, de esa manera, reducir, de manera considerable la duración del viaje de los aviones actuales”, explicaron desde la agencia espacial norteamericana.
Con esta velocidad, la NASA pudo calcular que el trayecto Londres-Nueva York o realizar una travesía transatlántica podría realizarse en tan sólo 90 minutos, contra las cinco horas que, por ejemplo, actualmente demanda la primera opción.
Además, el estudio que está a cargo del Centro de Investigación Glenn de la NASA sugiere que, si bien actualmente ya existen mercados potenciales de pasajero en unas 50 rutas establecidas, las mismas están limitadas exclusivamente a las transoceánicas, incluso sobre el Atlántico norte y el Pacífico, debido a que países como Estados Unidos prohíben los vuelos supersónicos por tierra.
A pesar de ello y, como parte de su misión Quesst, la NASA está desarrollando, junto con la firma Lockheed Martín, el Programa de Vehículos Aéreos Avanzados (AAV), cuyo objetivo central es fabricar un avión supersónico silencioso, llamado X-59, que, según esperan, les permita modificar esta situación y despejar el camino para aviones que vuelen entre Mach 2 y Mach 4, o sea a una velocidad de entre 2.470 a 4.914 kilómetros por hora.
El AAV está a punto de pasar a su siguiente fase de investigación para viajes de alta velocidad, en la cual buscarán contratar empresas para que desarrollen diseños y exploren posibilidades de viajes aéreos, como así también, estudien los posibles riesgos e identifiquen las tecnologías necesarias para hacer Mach 2.
“Habrá dos equipos trabajando en la investigación: uno encabezado por Boeing y el otro por Northrop Grumman Aeronautics Systems. Cada uno de ellos propondrá diseños de aviones capaces de mantener altas velocidades supersónicas”, explicó Mary Jo Long-Davis, gerente del Proyecto de Tecnología Hipersónica de la NASA.
"Si bien viajar en aviones comerciales supersónicos es posible, es fundamental innovar de manera responsable, y en eso estamos trabajando para que, en un futuro no muy lejano, los vuelos comerciales sean no solo mucho más rápidos que los actuales sino, también, más seguros", concluyó la especialista.
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