Mientras realizaban tareas de excavación en el yacimiento arqueológico de Libisosa, ubicado en el municipio de Lezuza, en la provincia española de Albacete, dos arqueólogos se sorprendieron al encontrar una gran cantidad de armas y elementos que datan del período prerromano y de las guerras civiles en Roma, o sea, de los siglos II-I. a.C.
Según el estudio publicado en la revista Gladius, en total, Fernando Quesada Sanz y Héctor Uroz Rodríguez descubrieron 32 armas ofensivas y defensivas, dos umbos, varias piezas bivalvas de hierro que se colocaban en el centro de los escudos para la protección adicional de la mano del legionario, un vaso con la imagen de dos guerreros íberos y varios arreos de caballo.
Entre las armas encontradas que más llamaron la atención de los investigadores se encuentra una espada que data de mediados del siglo II a.C., del tipo ‘gladius hispaniensis’. “Fue encontrada apoyada verticalmente contra una pared, lo que ha provocado una curvatura no intencionada de la hoja»”, señalaron los especialistas
En tanto, otro de los objetos más curiosos es un casco completo, del tipo ‘Montefortino’, de más de 1,5 k. de peso que, según el relato de sus descubridores, estaba escondido entre varios objetos excepcionales apilados en el interior de un pequeño hogar que probablemente servía para algún tipo de ritual.
Tracker: el cuchillo del rastreador
Cronológicamente, los milenarios objetos hallados se dividen por igual entre dos períodos distintos. Mientras el primero es el tercer cuarto del siglo II a.C., cuando la región fue conquistada por los romanos durante las guerras lusitanas y celtibéricas, el segundo coincide con la guerra Sertoriana (82-72 a.C.), un importante episodio de las guerras civiles protagonizadas por la entonces República romana.
“Para el periodo que conocemos como ‘baja época ibérica’, que desde la otra perspectiva corresponde al periodo romano republicano en Hispania, este lote de armas de Lezuza es uno de los más completos e importantes de la península ibérica, por su relevancia y calidad, al nivel de los de Numancia, Caminreal u Osuna”, concluye el estudio.
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