Se inicia, como todos los años, el ciclo donde el cazador y tirador deportivo espera la apertura de la temporada de caza menor. La pandemia modificó algunos dogmas que se repetían de manera tradicional desde hace años, por lo que en 2021 el comienzo de la temporada no solo dependerá de los distintos ministerios o secretarías de medio ambiente, fauna o vida silvestre, sino de los distintos protocolos sanitarios por el Covid, tanto nacionales como provinciales. En síntesis, a la fecha de cierre de esta edición nada estaba claro, todo era un gris potencial, comentarios off the record. Tras varios llamados y consultas con las provincias de Córdoba, Santa Fe, Río Negro, Entre Ríos, La Pampa y Buenos Aires, obtuvimos los datos que siguen, pero que pueden cambiar acorde a la evolución de la pandemia y del termómetro político y/o sanitario. Veamos...
- > Córdoba: iniciará su temporada desde el 2 de junio hasta el 29 de julio para perdiz, liebre y algunas variedades de patos.
- > Santa Fe: habilitará la actividad desde el 22 de mayo hasta el 21 de julio solamente los sábados, domingos y feriados. El cupo será de 5 perdices y 2 liebres por cazador/día.
- > Río Negro: comenzó el 1 de mayo y la cerrará el 31 de julio. Las especies permitidas son liebre, paloma torcaza, la codorniz californiana y el conejo silvestre.
- > Entre Ríos: estima que su temporada comenzará el 21/5 y se extenderá hasta el 15/8, y que las especies permitidas serán perdiz, liebre y pato. Los entrevistados consultados manifestaron que habrá protocolos especiales de bioseguridad, por lo que no se podrá desplumar ni eviscerar los animales cazados en el campo. En el mismo sentido, todo desperdicio generado deberá ser transportado en una bolsa de color rojo.
- > La Pampa: su temporada es desde el 1 de mayo al 31 de julio y solo se podrá cazar perdiz común y montaraz; por ahora están vedadas otras especies.
- > Buenos Aires: probablemente baje la bandera de largada entre el 6 de mayo y el 31 de julio, para perdiz, liebre, pato y paloma.
- Como mencionamos al comienzo, son todos datos potenciales recabados hasta el 23 de abril. El consejo es conectarse con el sitio web de la provincia a visitar antes de proyectar una salida, no solo para consultar si la temporada está, cuáles son las zonas habilitadas, los costos de los permisos y cómo tramitarlos, sino para conocer –fundamentalmente– qué normativas hay que seguir por el Covid.
- Un tema importante que surge a partir de las redes sociales es el de los guías. Son varios los que ofrecen salidas consolidadas previo a que se conozca con certeza si determinada provincia abre la temporada. No hay que dejarse engañar, y mucho menos pagar por anticipado. La caza furtiva está penada por la ley. Y si una provincia o zona estuvo habilitada en 2019, no significa que este año lo esté. Por lo que si alguien asegura que puede llevar gente a cazar antes de que se conozcan los reglamentos, estaría mintiendo, a menos que se trate de cotos con permisos especiales o de alguna especie plaga cuya cacería, por lo general, se encuentra habilitada todo el año, lo que no la exime de cumplir con los protocolos nacionales y locales de la pandemia. En caso de querer contratar un guía previendo que la temporada se va a abrir, dejar asentado por escrito de antemano con dicha persona que el importe abonado será restituido en su totalidad en caso de que por fuerza mayor la temporada en esa zona no se habilite.
Por último, recordar todos los papeles y credenciales necesarios para viajar, y revisar que estén vigentes: desde el registro de conductor, el seguro del vehículo, la credencial de legítimo usuario y tarjeta de consumo de munición, sin olvidar de tramitar el permiso de circulación a través de la aplicación Cuidar (modo verano) o de la web www.argentina.gob.ar/circular
Ya pasamos 19 meses soñando con la temporada de caza y llegamos a esta instancia probablemente sin haber visto en qué estado se encuentra la escopeta y ni siquiera si tenemos suficientes municiones. Es un buen momento para desempolvar los pertrechos y ejercitarnos no solo en el polígono, sino realizando caminatas para acostumbrar el físico al desafío por venir. Largarnos a la aventura de transitar en promedio 600 km entre ida y vuelta de casa a la localidad elegida, y recorrer los campos sin haber tenido una mínima ejercitación, no solo pueden afectarnos la salud, sino que el cansancio y el agotamiento provocarán no atinarle a la presa, y ello nos frustrará, por lo que un día para disfrutar se convertirá en uno para desterrar. Olvidemos el 2020 y vayamos por un gran 2021.
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