No es noticia que la salud es uno de los temas más relevantes del momento. Con la constante preocupación que ronda debido a la pandemia de COVID-19, un informe reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que para llevar una vida saludable es necesario realizar 5 horas (300 minutos) semanales de actividad física. Tal vez pueda parecer mucho, pero con la bicicleta se vuelve mucho más fácil.
Una media de 300 minutos semanales de actividad física puede resultar demasiado para más de uno, más aún si consideramos la rutina y las obligaciones a la que estamos sujetos diariamente. Por ejemplo, si planteamos una actividad física de una hora de duración (ya sea fútbol, gimnasio, natación, etc.), eso implica que deberíamos entrenar como mínimo 5 veces a la semana.
Llevar una rutina de ejercicio de este tipo implica un importante cambio de hábitos para más de uno, el cual es aún más grande si hablamos de alguien que viene siendo sedentario desde hace tiempo. Pero más allá de esto, el objetivo se vuelve realizable si nos subimos a la bicicleta.
Lo primero a destacar es que la bicicleta no es una actividad explosiva (aunque también puede serlo), es decir que no requiere de un enorme desgaste física en un período corto de tiempo, sino que tranquilamente se puede llevar a cabo con un ritmo moderado durante un largo período de tiempo.
Por caso, si tenemos la suerte de coincidir con un grupo de amigos, podemos organizar salidas los fines de semana de dos o más horas, ya sea un día o los dos, por lo que en la semana solo tendríamos que salir una o dos veces más para completar las cinco horas semanales.
La bicicleta como transporte
Además, no olvidemos que la bicicleta es un medio de transporte que podemos utilizar todos los días para ir al trabajo, la universidad, etc. Por ende, si nosotros la utilizamos de lunes a viernes para ir a la oficina, 30 minutos de ida y 30 de vuelta, casi sin darnos cuenta estaremos cumpliendo con la recomendación de la OMS.
Llevar una vida sana en estos tiempos es más primordial que nunca, y la bicicleta se presenta como un instrumento muy aconsejable, incluso para aquellos que no son apasionados de la actividad física. Ya sea que disfrutemos de travesías largas con amigos o la utilicemos en el día a día para evitar el transporte público, lo cierto es que pedalear es el mejor favor que podemos hacerle a nuestro cuerpo hoy en día.
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