Ya se pescan pejes en la Arenera del Faro

La llegada de Semana Santa cierra oficialmente la temporada de verano en la Costa Atlántica y -con ello- los guardavidas finalizan su trabajo. Casi como un ciclo o una coreografía, la historia se repite año tras año cuando los pescadores comienzan a averiguar lo que sucederá con la Arenera del Faro, que no es más que una extensión de playa donde están los famosos balnearios del sur, justo donde comienza la Ruta 11 que llega hasta la ciudad de Miramar. Dada su ubicación geográfica su extensión de arena “mira” en dos direcciones diferentes: en la zona del “balcón”, hacia el este-estesudeste, y -después de una curva pronunciada- hacia el sud-sudeste en la zona del arroyo. Por eso se convierte en un sector ideal para la pesca del pejerrey, que arrima a la costa de forma masiva influenciado por la corriente fría de Malvinas y que se siente muy a gusto en un ecosistema marino que tiene, unos metros adentro del mar, una importante masa coral y de piedras conocida como la Restinga del Faro. Dicho sea de paso, un excelente lugar para capturarlos de embarcado.

La Arenera posee accesos públicos, a través de caminos peatonales que conectan la ruta con el mar. Este contexto dificulta muchas veces la faena, dado que la pesca de playa requiere de equipos pesados (variada de mar, surfcasting) y una serie de elementos que a veces es difícil transportar. Mar del Plata no posee bajada pública para vehículos 4x4, ni mucho menos acercarse con los de tracción simple, y por tal motivo los cañófilos dependen exclusivamente de los servicios privados que ofrecen alguno balnearios. En tal sentido, este año aparecen dos opciones. El Balneario Horizonte del Sol es una tradición, ubicado en Avenida de Los Trabajadores al 4000. Allí está Enrique, quien ofrece el servicio de bajada de vehículos a la arena o bien el estacionamiento del lugar. Tiene un costo de 1000 pesos por auto o camioneta y está abierto desde las 7 de la mañana. Respecto de la salida de los pescadores, no hay inconvenientes: se puede charlar previamente o bien llamarlo a “Quique” al 223 551-4055 en el momento que el pescador desee emprender el regreso.

Más al sur, en el kilómetro 4,5 de la Ruta Provincial 11, está Piedra Marina Club de Playa, el otro balneario que abrió sus puertas para los pescadores. Allí se ofrece el ingreso y estacionamiento de autos, pero no cuenta con bajada a la arena. Tiene un costo de 400 pesos por persona y posee baños, agua caliente, plaza de juegos habilitada y fogón, por 500 pesos adicionales, que incluye parrilla, mesas y sillas. Todo, para mayores de 12 años. El horario es de 8.30 a 18 y para cualquier información, podrán comunicarse con Luis al 223 546-6638.

En cuanto a los resultados de pesca, todavía es muy pronto para los análisis, dado que durante varias semanas el mar estuvo fuerte. Aquellos que hicieron patria y sus primeros intentos, se encontraron días dispares en los que apareció mucho pescado chico y -en días puntuales- menos cantidad, pero más calidad. A diferencia de otros años, la zona está mucho más embancada, sin los típicos pozones o canaletas amplias. Pero la historia recién empieza. Una vez que los fanáticos se vuelquen masivamente y la cancha quede bien cebada, pronto estaremos hablando de los grandes escardones del invierno marplatense.