Viandas: alternativas sanas y sencillas para resolver las comidas al aire libre

Aunque esta actividad está asociada casi exclusivamente a una rama de la gastronomía como es la parrilla, los tiempos cambiaron, y con él, quienes la practicamos y la forma en que nos alimentamos. La información sobre nutrición está más a mano, y ya somos conscientes que tener una alimentación sana y natural es lo adecuado para nuestro sistema inmunológico. Además, no podemos desconocer que en nuestras filas contamos con diabéticos, veganos o vegetarianos, así que recopilamos una serie de sugerencias para decidir qué comer cuando no hay asado en nuestra salida de pesca. 

En primer lugar, vamos con los elementos y el medio ambiente. De ninguna manera podemos dejar residuos, y no hace falta decir que plásticos, vidrios, nailon, entre otros vuelven con nosotros. También, cuanto menos peso llevemos mejor, por eso sugerimos en lo posible utilizar vasos, cubiertos y platos descartables, es más, si va algún vinito incluido en el menú, pasarlo previamente a un envase plástico, eso nos evitaría la decepción de que se rompa la botella y al terminar la jornada, descartamos todo antes de regresar. El mate es una tradición insoslayable, pero a veces, es engorroso cebarlo con viento o el movimiento de una embarcación, nos ocupa las dos manos, y parece que no hacemos más que sostenerlo o cambiar la yerba para perder el único pique del día. Por eso, reemplazarlo por cualquier infusión ya lista en un termo puede ser más práctico. En mi caso, suplanto el café por la malta, pero el mate cocido es el que mejor me resulta. Reemplazar las típicas facturas por galletitas caseras se puede, hay recetas simples como las de algarroba y avena que se preparan en media hora, también las barritas de cereal son muy nutritivas, cómodas de llevar en los bolsillos y nos permiten ingerir muchas calorías fácilmente contrarrestando las bajas temperaturas, algo ideal para los que están con waders en el agua, como los mosqueros o los que gustan de vadear las lagunas buscando el pejerrey.

Las comidas principales pre cocidas podemos llevarlas en el clásico tupper, ya cortada, para directamente comerla con tenedor. Eso nos permite apoyar el envase, no soltar la caña y encarnar sin limpiarnos. Así, tortillas, milanesas, croquetas de cualquier tipo o pollo se vuelven excelentes alternativas. Los enlatados y las sopas en sobre, son buenos complementos, al igual que la pasta box, fácil de transportar y a la que solo hay que agregarle agua caliente para tener un plato en cinco minutos. El charqui, que fue una solución para nuestros gauchos, ahora se desarrolla de forma industrial y viene en prácticos envoltorios listos para comer o calentar, con el detalle de ofrecer variedad de sabores, algo que para quienes hacen pesca en kayaks, es sumamente recomendable. 

Por último, podemos añadir los encurtidos o escabeches de carnes u hortalizas que aguantan varios días sin frio, se pueden acompañar con galletas o pan y se pueden elaborar en casa. Lo mejor es hidratarnos con agua, a lo sumo, las saborizadas, evitando las gaseosas que suelen perder el gas o explotar cuando las abrimos después de sacudirlas. Por supuesto esperamos sus recetas y ampliar próximamente este informe.