La enfermedad que afecta a los lobos marinos generó que se cierre el acceso a muchas playas o escolleras que son muy visitadas por el pescador deportivo, que, a su vez ha bajado su concurrencia a muchos de estos sitios por el miedo que genera la influenza aviar.
En las costas rionegrinas, pesqueros que venían dando muy buenos resultados con el pez gallo y el pejerrey de manila, el acceso a las playas se ve imposibilitado en este momento. Por decreto municipal, el municipio de Viedma prohibió todos los ingresos a lo largo del Camino de la Costa, en una medida que se extiende por 14 días. La resolución incluye las playas El Pescadero, Bajada Érica, Bajada de Cailoto, Playa Central, Playa Intermedia, Bajada el Faro, Bajada de Picoto, todas en la zona del balneario El Cóndor; además de El Espigón, Playa Bonita, Lobería, Bahía Rosas y Bahía Creek. Además, en Sierra Grande, quedó suspendido el ingreso a los diferentes sectores del Parque Nacional Islote Lobos, con especial énfasis en el sector sur, vecino a la localidad de Playas Doradas. Muy cerca de estos destinos, se dio el primer caso de gripe aviar en un lobo marino de la zona, el cual fue hallado muerto en el Puerto San Antonio Este, ubicado a 65 km de Las Grutas por RN 3. Allí, en Las Conchillas, si se pudo realizar el fin de semana las seis horas del pejerrey, la Fiesta Nacional que congrega a muchos aficionados de la región.
En territorio bonaerense, aunque la preocupación abarca a muchas playas de la provincia, en Mar del Plata el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), tras confirmar semanas atrás la presencia de gripe aviar en dos ejemplares, ordenó cerrar el acceso peatonal a la Escollera Sur de manera preventiva, situación que se mantiene al día de la fecha.
El pejerrey corno ya pica en Las Grutas
En Necochea, también la Escollera Sur se debió cerrar. En ella, se encuentra el Descanso de los Lobos Marinos, una de las colonias más grandes de la provincia de Buenos Aires y un distintivo particular de la ciudad costera. Allí, se dieron los primeros indicios de esta enfermedad de la que la principal hipótesis es que llegó al país a través de aves migratorias, mutó y pasó a los lobos marinos, como ya había ocurrido en Perú y Chile.
Aunque se registraron muertes de lobos en San Cayetano, Orense o Claromecó, entre otros destinos, no hubo prohibiciones de acceso. Si, desde el SENASA, se pide evitar el contacto directo con aves silvestres y superficies potencialmente contaminadas, identificar los lugares donde fueron enterrados los animales afectados y lavarse las manos con frecuencia. La Región Sanitaria VIII, que abarca desde el partido de La Costa hasta San Cayetano e incluye a Mar del Plata y Necochea, emitió un comunicado donde se recomienda evitar el ingreso y circulación de personas y vehículos en la playa o espacio afectado.
Se espera una pronta solución a esta problemática que afecta a las colonias de lobos marinos y golpea distintos destinos turísticos. Esperemos que en el corto plazo, sean buenas las noticias.
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