El frío obligó a trabajar para pescar en el fin de semana

El último tramo de mayo llegó con muy bajas temperaturas y una supuesta próxima semana con temperaturas inferiores al 0°C. Esta situación afecta de sobremanera la pesca, permitiendo que algunas especies vayan encontrando un mejor hábitat, y en otras, la actividad evidencie una merma. 

Entre las lagunas, el frío hizo mella y la pesca se volvió un poco más difícil. En Madariaga, según nos contaban pescadores habitués de La Salada, el pique no es fácil pero los portes hacen que sea una de las que más aficionados atrape. Según el momento y la situación se alterna entre garete, contra garete y anclados, con un nivel que ha mejorado tras las lluvias. Sin guía cuesta muchísimo más, con el servicio de un experimentado conocedor se puede fallar, pero el porcentaje baja notoriamente. Cochicó firme al igual que Cuero de Zorro.  En La Brava el peje no quiso comer sábado y domingo en los sectores clásicos, si lo hizo en puntos más aledaños a la costa o más tranquilos, quizás el frío afectó o la importante afluencia de pescadores por el Provincial, con casi 200 cañistas en la competencia. Por el centro sudeste bonaerense, La Barrancosa sigue cumpliendo embarcados, con medianitos y alguna sorpresa, similar presente en La Tigra, con alguna captura de 500 a 600 gramos entreverada. El Albardón dio poco, pero calidad. 

Cerca de CABA, La Boca sigue rindiendo en inmediaciones a Pila. Aunque el frío cambió la cosa, como decía el guía Esteban Toffani, con paciencia y trabajando mucho metieron muy buenas salidas, siempre siendo efectivos para salir con una cuota importante.  Entre las opciones costeras, la cantidad mermó un poco con el frío. Hinojo Chico estuvo con lindas piezas, trabajando mucho. Blanca Chica no todos pescan, pero tiene calidad. 

Si hablamos de la pesca embarcados en el Río de la Plata hay que decir que fueron buenos los resultados tanto hacía el norte como al sur. Desde Berisso, portes de 30 a 45 cm, pejerreyes muy vigorosos que picaron con líneas de flote con bigotera. De costa, los clubes porteños entregaron mejores resultados nocturnos con el peje, también de orilla. A diferencia de las lagunas, aquí la cosa está en ascenso. 

En la playa, lo más presente fue el peje. En Reta se mezcló con lindas burriquetas y peces palo, algo similar en Monte Hermoso. Por San Blas, los pejerreyes firmes y también el róbalo. Por Miramar nos decía Marcelo Arias que luego de una dura semana sin poder pescar por el mal clima, el domingo apreció el viento norte y nuevamente presencia de los escardones y se sumó algún sargo, con ansías de que la cosa se mantenga en la semana ya que el viento se mantendrá del mismo sector. En Mar del Plata, Ale Roucco nos enviaba imágenes con un pez palo que fue el actor principal en la pesca. 

En una recorrida breve federal analizando eventos que pasaron, mención al torneo a la pieza de mayor peso "APYCAC" en la Costanera de Villa Carlos Paz, provincia de Córdoba. Allí, en el San Roque, entre 113 pescadores, Claudia Bustos se llevó el primer puesto con una captura de carpa de 5.105 kg. En Buenos Aires, específicamente en el Paraje Las Cascadas del Río Quequén se logró ganar con un pejerrey de 458 gramos, en una pesca muy escasa en un interno del Club de Pesca Lobería. En Tres Arroyos, laguna Goizueta tuvo un picadito, con bajos pesos en la clasificación y 228 inscriptos. Ganó Emanuel García con 354 gramos y se llevó $ 750,000. 

A preparar las cañas y no olvidar los abrigos de cara a lo que se viene, ni más ni menos que el último fin de semana de mayo, en las puertas de junio, el mes de la llegada del invierno.