Le dieron la oportunidad ni bien se levantó la fase 1 de la cuarentena en Santa Fe, y nuestro amigo Luciano Davicino, de Popina Excursiones, no la desaprovechó. Primero salió con su amigo "Camote" y luego con algunos clientes que pudieron contratar sus excursiones. Es bien sabido que las condiciones del río Paraná no son las mejores, pero estos guías que, a la vez, son muy buenos pescadores, se las ingenian para dar con las mejores oportunidades de pesca.
Luciano sale muy temprano de la marina para poder ampliar el abanico de oportunidades y recorrer tanto costas santafecinas como entrerrianas en busca, principalmente, de los dorados sin descartar a las otras especies cazadoras. Si bien están abiertas las posibilidades de pesca con carnadas naturales, en estas últimas salidas, amigos y clientes eligieron pescar solamente con artificiales, utilizando el bait y el fly como modalidades.
En apenas unos minutos desde la guardería y sobre el gran río Paraná explotan unas correderas contra la barranca y hacia allí fueron los primeros lances con señuelos que profundizan hasta 2 m. Los resultados no fueron inmediatos, pero la perseverancia dio sus primeros buenos piques. Desde allí se fueron por los riachos más profundos hacia el interior y en muchos lugares donde afloran todo tipo de arboles, raigones y palos pudieron hacer nuevos intentos. El sol ya pegaba de otra manera, el clima era distinto y los dorados estaban con ganas de comer, resultado una muy buena pesca de pescados de entre 2 y 4 kg.
Cruzando de provincia también pudieron dar con buena pesca, pero esta vez con flycast, utilizando moscas grandes en colores oscuros. Sin dudas, la poca circulación de embarcaciones, la baja presión de pesca y otras circunstancias naturales dieron paso a nuevos pesqueros que hoy pueden ser disfrutados por estos guías que solo quieren cuidar el recurso sabiendo que un pescado vivo vale muchos más que los muertos.
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