El koala es un animal típico de Australia. Aunque algunos lo confundan con un oso, en realidad es un marsupial herbívoro que se alimenta de las hojas de eucalipto. Aunque existen más de 600 tipos de eucaliptos en el país, ellos solo se alimentan de tres tipos. Y este es uno de los tantos datos curiosos que esta especie tiene para ofrecernos.
Su nombre: la palabra koala significa “el que no bebe agua”. En realidad, sí toman agua, pero la obtienen de formas muy variadas; por ejemplo, absorben la humedad de las hojas de eucalipto que comen o lamen los troncos lisos de los árboles.
Pelaje: el pelo del koala varía según la zona de Australia donde esté. Por ejemplo: los del sur tiene un pelaje más largo y ondulado que los del norte, ya que necesitan mantenerse calientes durante los fríos inviernos.
Tamaño: un adulto puede medir entre 60 y 85 cm, y pesar hasta unos 15 kilos; mientras que las hembras son más pequeñas. Los koalas más grandes viven en las regiones menos cálidas.
El koala está al borde de la extinción
Crías: un koala recién nacido pesa apenas 1 gramo. Las crías se desarrollan en la bolsa de la madre durante unos seis meses y después pasan a viajar sobre su espalda durante otro medio año, utilizando únicamente la bolsa materna para alimentarse y dormir.
Transpiración: al no tener glándulas sudoríparas, los koalas no pueden transpirar. Para refrescarse suelen lamerse los brazos o estirar su cuerpo entre las ramas frescas de los árboles.
Alimentación: se alimentan a base de hojas de eucalipto. Pueden llegar a ingerir hasta 1 kg por día. Lo más llamativo es que el eucalipto es venenoso para la mayoría de los animales, pero ellos pueden comerlo gracias a que poseen un órgano especial de digestión de fibra que filtra las toxinas de las hojas.
Esperanza de vida: un koala en estado salvaje puede vivir unos 10 años aproximadamente. Las hembras viven un poco más porque son menos conflictivas.
Reproducción: durante la temporada de reproducción, los machos expresan territorialidad bramando y frotándose el pecho contra la base de un árbol, dejando así una marca característica de olor con su glándula torácica. Las hembras braman también durante este tiempo, pero no son territoriales.
Fuente: Muy Interesante
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