Como si a Estados Unidos no le sobraran preocupaciones entre el coronavirus y la avispa asesina, ahora la invasión de un nuevo insecto ha prendido todas las alarmas en el estado de Washington: la polilla gitana.
Al no ser una especie originaria de Estados Unidos, su aparición en grandes números ha llamado la atención y generado preocupación en las autoridades. Una invasión de polillas gitanas puede causar un debilitamiento severo en los árboles y arbustos, incluso provocar la muerte de grandes jardines, huertos o bosques.
El gobernador del estado, Jay Inslee, afirmó que “este peligro inminente de infestación pone en grave riesgo las industrias agrícolas y hortícolas de Washington y amenaza seriamente el bienestar económico y la calidad de vida de los residentes”. Debido a la masiva presencia de este tipo de polilla, Jay Inslee declaró el estado de emergencia en el condado de Snohomish.
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La polilla gitana es proveniente de Europa y Asia, aunque no es la primera vez que aparece en Estados Unidos. Llegó al país en 1860 y a lo largo de los años ha generado daños millonarios en los bosques madereros. El perceptible incremento de su población ha prendido todas las alarmas debido al temor de una nueva invasión.
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Hay que tener en cuenta que las hembras de esta especie pueden llegar a poner más de 100 huevos. Mientras que sus orugas son capaces de masticar más de 500 especies de árboles y arbustos. Además, esta polilla tiene la capacidad de volar largas distancias, por lo que existe el riesgo de que se propague fácilmente por todo Estados Unidos.
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