Ubicada al norte de la provincia de Buenos Aires, en el límite con los municipios vecinos de Alberti, Bragado, Carmen de Areco, Chivilcoy, Junín, Salto y Suipacha, en el día de hoy la ciudad de Chacabuco, cabecera del partido homónimo, está celebrando su 156º aniversario.
Quequén festeja su cumpleaños número 167
El nombre dado oficialmente al pueblo por decreto del 5 de agosto de 1865, día de su fundación, fue el de “Guardia Nacional”, el cual siguió figurando en todos los documentos escritos hasta que, en 1870, se lo cambió por el de “Pueblo de Chacabuco”, con el cual se lo conoce desde entonces.
Si bien el nombre de“Las Estacas”, que muchos historiadores refieren como de esta ciudad, no aparece en ningún documento escrito, se lo relaciona con el hecho que cuando se trazó el plano original del pueblo -el mismo día de su fundación-, y se dividieron los solares del ejido urbano, los mismos fueron identificados con estacas de ñandubay y sauce.
En la época de la fundación de la ciudad, la zona era habitada mayoritariamente por pobladores que vivían en campos donados por el Estado por méritos de guerras, como por ejemplo, el del General Ángel Pacheco, aunque también había pobladores aislados que defendían las tierras públicas, mejorándolas, con la cría de hacienda y la siembra del maíz y del trigo.
La ciudad de Chacabuco nació como consecuencia directa de la Guerra de la Triple Alianza o Guerra del Paraguay, para premiar a los soldados de la Guardia Nacional de la campaña, recompensados por la acción. De hecho, el decreto fundacional establecía que “para premiar el patriotismo y decisión de la Guardia Nacional de la Provincia en la lucha en el Paraguay, se encargaba al Departamento Topográfico el trazado de un pueblo y amojonamiento, cuyas parcelas se entregarían a los valientes soldados”.
Ese mismo decreto designó al primer juez de Paz de la ciudad y creó una comisión de vecinos respetables, a la que bautizaron “Comisión Fundadora”, con el fin que se hiciera cargo de todo lo vinculado tanto a la fundación y a la ubicación del pueblo, como así también al mejoramiento del mismo y a la construcción de las primeras obras públicas.
Así, el 7 de enero de 1866, en una ceremonia que tuvo lugar en la estancia “Los Criollos”, tomó posesión de su cargo el señor Duberty, la primera autoridad oficial constituida en el partido cuando todavía carecía de población.
La futura población fue erigida con muchas dificultades ya que, si bien en un primer momento el lugar elegido en los planos como centro de la plaza principal daba a una cañada, tuvo que cambiarse la ubicación, por lo que el 5 de febrero de 1866, reunidos el agrimensor Lynch, el juez de Paz Duberty y miembros de la Comisión Fundadora, se clavó un rústico mojón de ñandubay, en el punto elegido para el centro de la plaza.
De esta manera, y en una ceremonia por demás sencilla, nacía este nuevo pueblo de la provincia de Buenos Aires que, a pesar de estar muy alejado del mar, apartado de las márgenes de los ríos caudalosos, y sin la protección del bosque o de selva milenaria fue creciendo vertiginosamente gracias al gran esfuerzo de sus primeros habitantes y de sus descendientes que supieron aprovechar al máximo la gran riqueza de sus tierras y, especialmente de su ganadería, que se convirtió en una de las principales fuentes de ingreso.
Mientras en el año 1889 el mismo nombre de Chacabuco fue utilizado para bautizar a la estación lugareña del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico, finalmente, el 18 de Junio de 1918, el creciente pueblo fue elevado al rango de ciudad.
Así, con el correr de los años, la ciudad se convirtió en un lugar muy buscado por los inmigrantes europeos, especialmente por los españoles, vascos franceses e italianos. Aunque también llegaron numerosas familias francesas, irlandesas, suizas y sirio libanesas, lo que la convirtieron en un verdadero crisol de razas.
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