En los próximos años, la población mundial comenzará a registrar una abrupta caída debido, fundamentalmente, a que tendrán lugar más muertes que nacimientos en la mayoría de los países, según da cuenta un reciente estudio elaborado por un equipo de especialistas del Instituto de Métricas y Evaluación de Salud de la Universidad de Washington.
Según explicaron los autores del estudio a The Lancet, se estima que, para el año 2050, una amplia mayoría de naciones, más puntualmente 155 de 204, experimentarán índices de fertilidad insuficientes como para poder sostener sus poblaciones actuales, en tanto que ese preocupante fenómeno se intensificará hacia el año 2100, cuando se estima que el 97% de los países (198 de 204), afrontará esa realidad. De esta manera, el número de defunciones sobrepasará al de nacimientos, conduciendo a un paulatino decrecimiento de la población mundial.
Para llevar a cabo este revelador estudio, los investigadores exploraron las tendencias globales de fertilidad en 204 países entre 1950 y 2021, con predicciones para 2100 y, además, analizaron los datos del Estudio de Carga Global de Enfermedades, Lesiones y Factores de Riesgo 2021 del IHME, que muestra tanto el presente y el futuro regional, como, así también, las tendencias nacionales y mundiales en materia de fecundidad y nacimientos vivos.
"La verdadera problemática radica en la capacidad de nuestro planeta para proveer los recursos necesarios que garantizan la supervivencia y el bienestar de la población global, incluyendo aspectos vitales como el acceso al agua potable, alimentos nutritivos, energía sostenible y la gestión de desechos, entre otros", explicaron los especialistas.
"Si bien en principio el descenso de la población mundial parece ser una buena noticia, el problema es que un descenso de población también acarrea otros efectos secundarios que deberían abordarse, por lo que es fundamental que las autoridades gubernamentales tomen, cuanto antes, medidas proactivas frente a las implicaciones que este cambio demográfico tendrá, irremediablemente, en muchos aspectos críticos de la sociedad", concluyeron.
.Por último, el estudio predice importantes y preocupantes cambios en el patrón global de nacimientos vivos entre los países desarrollados y en desarrollo: mientras en 2021, el 29 % de los bebés del mundo nacieron en África subsahariana, se estima que esta cifra aumentará en más de la mitad (54 %) para el año 2100.
Además, la lista de naciones con tasas de fecundidad superiores a la de renovación bajará del 24 % en 2050, a 2,90 % en 2100, lo que implica una tasa global de 1,6 hijos, en tanto que se estima que sólo 26 países seguirán experimentando un crecimiento demográfico en 2100, con un número de recién nacidos superior al de muertes, como los casos de Angola, Uganda y Zambia.
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