Tras casi dos décadas de desarrollo, la Armada de los Estados Unidos anunció que el caza F-35C, diseñado por Lockheed Martin, ya se encuentra listo para entrar en combate. Después de muchos años de espera, el denominado “avión más caro de la historia” podrá surcar los cielos.
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El F-35C fue construido para reemplazar a los experimentados F/A-18, aunque su función será muy diferente, ya que fue diseñado para que otros ataquen por él. Su capacidad para no ser detectado por los sistemas de radar lo convierten en una aeronave ideal para tareas de vigilancia y espionaje; lo que lo convierte en un caza de combate poco tradicional.
Por ejemplo, su sistema de detección de objetivos fija el objetivo, mientras que el ataque es realizado por la Marina estadounidense a través de misiles SM-6 disparados desde destructores clase Aegis. Otra opción factible es utilizar los F-35C con los F/A-18, que se podrían encargar del ataque a través de sus misiles aire-aire de medio alcance. Hay que aclarar que esta versión es diferente a la del F-35B, que ya entró en combate en septiembre de 2018.
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Difícil de calcular
Esta nueva joya de la aviación de combate ha recibido muchas críticas a lo largo de los años. Muchos pusieron en duda sus prestaciones -recordemos que en una ocasión fue incapaz de ganar un duelo aéreo a un F-16 de 1978- y otros tantos pusieron el grito en el cielo por sus altos costos, incluso el presidente de EE.UU., Donald Trump, afirmó que el proyecto estaba fuera de control.
Esta cuestión generó polémica desde el primer momento, ya que se llegó a un punto en el que resultaba muy difícil calcular el monto final al que había ascendido el nuevo caza. Incluso, en muchos medios se llegó a afirmar que "lo único indetectable del F-35C es su coste".
Según la estimación más reciente, el F-35C tiene un precio de 107,7 millones de dólares. Dentro de esta suma estrafalaria, uno de los componentes más llamativos es el casco del piloto, que tiene un coste de U$S 400.000. El F-35B, la versión de despegue corto y aterrizaje vertical, sale alrededor de 115,5 millones de dólares; mientras que para este año se espera que los costos del F-35A se reduzcan a 85 millones de dólares.
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