A lo largo de esta pandemia hemos visto diferentes e ingeniosos dispositivos para protegernos del COVID-19, pero pocos se pueden comparar con Blanc, una máscara de aspecto futurista que cubre todo el rostro.
Esta curiosa propuesta cubre los ojos, nariz y boca del usuario y cuenta con filtros HEPA aprobados por la FDA (organismo que regula los medicamentos en Estados Unidos), que aseguran una protección del 99% de las partículas, incluyendo polvo y aerosoles.
Además, la máscara cuenta con una serie de indicadores que a partir del color indican cuándo es necesario cambiar los filtros.
Algo muy llamativo de Blanc es que debido a su diseño es imposible reconocer a quien la utiliza, lo que pone al usuario en una completa situación de anonimato. Aun así, la máscara es modular, por que lo cada uno puede personalizarla a su gusto.
Para ello, el panel frontal se puede intercambiar por otros de diversos materiales, colores y texturas. A su vez, según sus creadores, Blanc se ajusta fácilmente a las características anatómicas de la cara. Su colocación se realiza de manera sencilla al unir los dos paneles simétricos de manera vertical.
Este producto se ha desarrollado gracias a una campaña de financiación colectiva en la plataforma Kickstarter, donde ya se han recaudado alrededor de U$S 120.000.
La máscara Blanc se vende a un precio de U$S 74 y llegará a los primeros compradores recién en marzo de 2021.
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