Les pregunté a varias casas de pesca de la ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires, cuál era la relación de venta entre equipos de spinning y equipos de baitcast. En promedio, el segundo supera al primero por un 80 % aunque algunas apenas venden el 10 % de cañas de spinning (contra 90 de bait). Ciertos propietarios me hicieron esta salvedad: “Vendemos 70/30 a favor de equipos de spinning, pero porque los usan para pesca variada”. Por último, un conocido comercio aclaró que la venta de reeles frontales chicos creció, en los últimos tiempos, y llegó a un 20 %, pero considerando que muchos no los emplearán para pescar con señuelos sino para buscar pejerreyes. Por lo tanto es imposible determinar un número comparativo con exactitud.
Desde la historia
Indudablemente desde 2000, por buscar una fecha redonda, el baitcast ha crecido tanto que se fagocitó a su hermano más viejo, el spinning. La diferencia básica es que el primero utiliza reeles rotativos, redondos o, mayormente, de bajo perfil, mientras que el segundo emplea frontales.
En nuestro país, para pescar con señuelos desde punto fijo, es decir, no a trolling, el spinning fue pionero. La explicación es muy simple: heredamos las costumbres de este pasatiempo de los ingleses, los primeros que lo trajeron y practicaron en la Argentina; en Gran Bretaña, como en toda Europa, el spinning era, y en gran parte aún lo es, la modalidad utilizada para este tipo de pesca.
En Brasil también empezaron a usarse los señuelos con los clásicos frontales o molinetes, como los llaman en portugués, pero la influencia del mercado norteamericano fue muy fuerte y, al final del siglo pasado, prevalecía el baitcast y, del mismo origen, se empezó a difundir el spincast, una mezcla de ambas modalidades. Esta última, que tan bien arraigada está en los que se inician en la pesca en Norteamérica, no prendió en Brasil y pronto el panorama fue similar a la Argentina: bait y spinning. Hoy en día existe una semejanza y una diferencia al respecto entre ambos países.
Semejanza: en ambos, la cantidad de baitcasteros supera ampliamente al número de los que practican spinning, pero en Brasil esta última modalidad está creciendo significativamente, según me comentó el gran periodista y amigo Rubens Almeida Prado. Rubinho, como se conoce a este revolucionario de la pesca deportiva, asevera que hay tres razones por las que la pesca con artificiales y reel frontal está avanzando mucho en su país: el uso del spinning en pesca vertical de mar, con grandes poppers en agua salada y en ultralight. Analicémoslo en el marco argentino.
El subibaja
La pesca vertical se realiza en agua salada y, en la Argentina, está casi circunscripta a Mar del Plata y los barcos más grandes, con capturas de pez limón, falso salmón de mar, chernias y meros, entre otros ejemplares que viven en las profundidades de bancos y piedras. Se puede practicar en otros puntos y, de hecho, he realizado hermosas notas en Pehuén-Co y Puerto Madryn, por ejemplo, pero son pocos los cultores en esas latitudes.
“El spinning para esta pesca es mejor que el bait: por la ubicación de las manos y el cuerpo, al pescador le es mucho más cómodo que el reel esté por debajo de la caña. En bait, el rotativo queda por arriba y, al subir y bajar los brazos para darle acción al jig, hay que luchar también contra el equilibrio de que la caña gire por causa del peso del reel. En cambio, con frontal, el trabajo en mucho más natural”, señala el periodista brasileño.
Imágenes que nos llegan de distintos pesqueros marinos de todo el mundo, vemos que se practica con reeles frontales, de frenos potentes para peces muy brutos, manijas de potencia y diversas protecciones contra la corrosión del agua salada. Es importante también el diámetro del carrete y no solo la cantidad de vueltas que da por manija. Si bien muchas veces nos obsesiona este último dato, el primero es fundamental para saber la cantidad de centímetros que recogemos en cada vuelta, aunque cuando el jig esté más profundo habrá variaciones, ya que la cantidad de línea que ha salido adelgaza el diámetro donde se la recoge. Solo a título ilustrativo, hay líneas de reeles que dan 5,7 vueltas de bobina por cada vuelta de manija. Sin embargo, el modelo 3500 recoge, como máximo, 98 centímetros, el modelo 4000, 102 y el modelo 6500, 131 centímetros. Con multifilamento fino esto es menos perceptible.
Arriba el plop
La pesca con grandes poppers en el mar no se practica en la Argentina porque no tenemos los peces de aguas cálidas que suben a tomar con violencia en superficie. Sin embargo, en muchos países de todo el mundo es una de las más preciadas por turistas y locales, ya que se obtienen piezas de gran peso y valor deportivo, como cuberas, GT, rooster fish, atunes y muchas más. El peso de esos poppers, que a veces oscila entre los 100 y 150 gramos, hace que un lance en spinning sea mucho más amigable, largo y sin las molestas galletas. “El tiro, en estos casos, cuanto más lejano, mejor, así cubrís más superficie, ya que no te obliga a un área pequeña como un palo en la pesca de dorados”, afirma Rubinho, que lo ha empleado varias veces en aguas tropicales.
Cuestión de peso
La pesca ultralight exige un equipo de spinning ya que, para lanzar señuelos de menos de ocho gramos, la resistencia que opone un eje al que hay que mover desde cero (reel de baitcast) es muchísima más que la que ofrece una línea que sale en forma de espiral.
No ignoro la existencia de maravillosos reeles de bait para ultralight, pero me sumo a las críticas que el sitio Ultralightanglers.com les realiza, como la dificultad para tirar un peso tan leve cuando sopla viento en contra, las citadas galletas, las vueltas de multifilamento que se clavan entre sí al utilizarse diámetros ultrafinos, el alto costo de reeles tan específicos y la menor distancia de tiro que originan. A favor del spinning existe también un punto innegable: es mucho más fácil de manejar para el que recién se inicia.
Conocí a algunos amigos que realizaban tiros muy precisos con spinning y otros que afirman que el baitcast es la única manera de ser exacto. Lo consulté con Rubinho, que me manifestó: “En tantos años de guiar en Amazonas no encontré diferencia, salvo el gusto personal. Conocí pescadores muy precisos para castear en spinning y también para usarlo como método para mover los señuelos de superficie y subsuperficie que utilizamos mucho porque son muy eficaces para pescar en esta selva. Todo es cuestión de entrenamiento”.
Está última frase me quedó en la mente: desde que tomé el curso de baitcast dictado por Rubinho en San Pablo en 2000 e introduje sistemáticamente en mis notas esta modalidad en la Argentina, se han dictado cursos y charlas para aprender a castear con reel rotativo y señuelos. Sin embargo, no recuerdo que se haya hecho lo mismo con el spinning. Quizá porque se dio por sentado que era conocido o por la facilidad con que se puede asimilar, no se ha ahondado en las posibilidades que brinda esta modalidad y, por ejemplo, no hemos aprendido cómo usarlo para mejorar en precisión y distancia.
Hay que aprovechar, entonces, la ventaja de esta modalidad y sacarles mayor jugo a sus posibilidades. Será cuestión de entrenar y sin agua, como me enseñó el maestro Rubinho, “porque si no, uno se tienta y se preocupa más por un pique o un pescado que por aprender a manejar la técnica”.
Para poner a punto la técnica recomendamos ver los siguientes videos
“Advanced Spinning Rod Tips for Casting that you need to know!”.
En castellano: “Distancias de lance con equipos de spinning”.
En portugués: “Como arremesar com molinete, técnica usando isca artificial”.
En inglés: “Casting Accuracy with Adam Royter”.
“How To Improve Casting Accuracy and Distance with Spinning Gear”.
“How To Cast A Spinning Rod & Reel Advanced Tactics”.
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