Para aquellos que están pensando en cambiar su forma de vacacionar o probar de qué trata esa vida nómade sobre un vehículo recreativo, la idea de no saber por dónde comenzar a buscar suele ser la pregunta más común. Básicamente, hay un par de cuestiones que antes de empezar en la búsqueda se deben saber: en primer lugar, el tipo de viaje que nos gustaría hacer o suponemos que podríamos hacer y cuánto tiempo le vamos a destinar (¿serán salidas relámpago o viajes de una, dos o más semanas?).
En segundo término, debemos amalgamar este tiempo con el viaje en sí mismo para arribar a destino, porque se demora más y se disfruta de otra manera. Y de este punto se desprende otro tema también importante: el presupuesto para la compra de la casa rodante, uno de los ítems más restrictivos dentro de la elección. Estos tres datos son el punto de partida para la elección de cualquier tráiler o motorhome. Resuelto esto, comenzaremos con una etapa de ajuste grueso en el proceso de búsqueda de vehículos. Lo que significa que ya tendremos más en claro si preferimos tener un viaje más aventurero o algo más tranquilo, yendo de camping en camping.
Otro de los ítems importantes, ya con los anteriores resueltos, es determinar la cantidad de ocupantes que va a llevar el vehículo, ya que muchas veces suele viajar un mayor número de personas pero a la hora de acampar algunas utilizan una carpa u otro hospedaje del lugar que están visitando.
Existen cuatro tipos de viajes que se pueden realizar con vehículos recreativos. El primero es de cercanía, y es el que se realiza los fines de semana largos o por poca cantidad de días. El segundo es similar, pero con trayectos más extensos donde los kilómetros a recorrer son más, los campings están más distanciados y eso requiere que el equipamiento sea más completo.
La tercera se trata de una salida que lleva mucho más equipamiento, porque a los campings organizados se suman lugares totalmente agrestes donde los recursos son escasos o inexistentes. Por último, el cuarto tipo es el viaje de aventura en el que no tendremos la posibilidad de contar con servicios, porque el acampe o pernocte será en lugares agrestes, abiertos y aislados, por lo que van a depender de la sustentabilidad del propio equipo, tanto de agua como de energía. Este tipo de viaje es el habitual de aquellas personas que buscan la naturaleza, las costas de los ríos o las playas solitarias cerca de algún centro costero donde la tranquilidad y los paisajes pasan a ser de cuentos o leyendas.
Con todo claro, la pregunta se resume a ¿motorhome, casa rodante o camper? Veamos pros y contras...
Motorhomes
Este vehículo nos dará muchísimo más confort en viaje y durante la estadía, pero el viaje requiere de más planificación para evitar tener que preparar permanentemente la unidad al movilizarse en caso de abandonar el camping o al momento de salir para visitar algún lugar, hacernos de provisiones o, incluso, limpiar los tanques. El cuarto tipo de viaje es mucho más incómodo con estos vehículos debido a su gran porte y poca posibilidad de moverse en terrenos difíciles, aún cuando estén preparados con tracción en todas sus ruedas.
Casas de arrastre
El mercado actual dispone de una diversidad muy grande en formatos, tamaños y equipamiento. La ventaja fundamental de estos equipos es la posibilidad de disponer de ellos sólo cuando es necesario, por lo que se des/acoplan a demanda, lo que nos da la libertad de poder dejarlos estacionados mientras utilizamos nuestro vehículo tractor para paseos o travesías. Como contrapartida de esta libertad, las casas rodantes de tiro exigen cierta habilidad de conducción para ser trasladadas de un lugar a otro, además de los gastos extra, considerando que es un tráiler adosado a unvehículo, lo que incrementa el consumo de combustible, los peajes, estacionamientos y hasta el seguro, entre otras cuestiones.
Campers
En medio de los dos grupos anteriores tenemos un híbrido, que en realidad es similar a la casa de arrastre pero adosada a la parte trasera de una camioneta, y que se traslada como si fuera equipaje en el sector de la caja de carga. Este conjunto se le llama camper y tiene la ventaja de ser estructuras estancas apoyadas sobre su base, por lo que es posible retirarlas y colocarlas de una manera simple, lo que permite mantener el vehículo libre en caso de necesidad para moverse. Ello se logra apoyando el camper sobre el suelo mediante las patas que suelen traer ubicadas en los extremos, lo que le aporta una independencia como si fuera una casa de arrastre sin ruedas.
Definida esta segunda elección, comenzamos con el tipo de equipamiento a llevar, considerando que muchas veces no tenemos en claro a los lugares que iremos o cómo vamos a empezar a desarrollar la actividad. Lo recomendable es comenzar con servicios básicos e ir escalando acorde a la necesidad. ¿Qué es lo básico? Cocina, baño y dormitorio o sector de descanso.
Equipamiento interno
La cocina puede iniciarse simplemente con un anafe portable y alguna conservadora, el baño puede ser químico, portable y de reducido tamaño, y el dormitorio o el sector de descanso –el más importante ya que es el que nos permitirá disfrutar de reponer energías– básicamente puede ser un sitio que tenga un buen colchón, que puede ser inflable, de espuma o incluso (en los grandes equipos) de resortes o elástico.
Un detalle importante es tener una buena ventilación tanto en verano como en invierno, ya que cumple la función de climatizar el espacio, sobre todo en zonas muy húmedas donde el calor puede llegar a ser bastante molesto. La energía eléctrica es otro factor a estudiar, no sólo el consumo interno sino la necesaria para mantener una iluminación general mínima exterior, sobre todo en los campings, donde no hay tomas 220 a los que conectarse. Por último, se pueden sumar tanques de aguas claras y los baños pueden empezar a tener duchas, lo que requiere de otros tanques para las aguas servidas. Y así sucesivamente con todos los opcionales que se deseen instalar.
Niveles y prestaciones
Cada comodidad que se sume al vehículo significará peso y espacio. Por lo cual eso exigirá tamaño y consumo de combustible, puntos que deben tenerse en cuenta sobre todo cuando los viajes se hacen en zonas montañosas de mucho viento o que tienen alguna situación complicada en el camino como el ripio, o falten estaciones de servicio. Demás está decir que los accesorios que se sumen al vehículo deben tener las condiciones para poder circular con seguridad, eso significa estar adaptados para golpes, vibraciones y movimientos bruscos sin salirse del lugar.
El mundo de los motorhome es similar, aunque hay distintos niveles. Se empieza por pequeños furgones o vehículos utilitarios y se va creciendo a medida de la necesidad del usuario, hasta alcanzar grandes estructuras sobre camiones con varios ejes.
Es común ver camperizaciones con alto nivel de terminación y una gran cantidad de accesorios que entregan alto confort y hasta prolongados períodos de autonomía. Pero también existen los simples ajustes a las condiciones originales del vehículo, con lo que se logra que con poco también pueda disfrutarse.
Las casas rodantes de tiro marcan que hay que tener en cuenta algunas condiciones extra, como la altura y la distribución del peso, el despeje de su parte trasera y la cantidad de ejes que, sumados al sistema de frenos, elevan de manera notable el peso del tráiler. ¿Qué exige esto? Mayor potencia del motor del vehículo tractor, por lo que en algunos casos hay que recurrir a camionetas 4x4 o autos con motores por encima de los 160 o 200 CV.
Siempre que un futuro rodantero esté buscando comprar un vehículo recreativo, lo aconsejable es que alquile al menos dos a tres días una unidad similar a la que piensa adquirir, para realizar la experiencia antes de hacer la inversión. De esta forma podrá ahorrarse mucho dinero en repensar la compra con sus propias necesidades y expectativas.
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