Como consecuencia de la histórica crisis hídrica que está aquejando a Mendoza- la peor de los últimos 30 años-, literalmente acaba de desaparecer una de sus lagunas más importantes, según informaron desde la Dirección de Recursos Naturales Renovables de esa provincia cuyana.
Se trata nada menos que de la emblemática Laguna Las Salinas, un gigantesco espejo de agua que está ubicado en la zona de El Nihuil, al sur del departamento de San Rafael, a unos 235 kilómetros de la ciudad de Mendoza capital.
Si bien no es la primera vez que la sequía afecta a Las Salinas, ya que en el año 2020 las autoridades tuvieron que extraer y trasladar a miles de ejemplares de peces debido a la escasez de agua, jamás se había llegado a semejante extremo que la muestra por estos días con su cauce totalmente seco.
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“Se ha reducido muchísimo más la laguna, y estamos caminando a escenarios de gran fragilidad. Es lo mismo que está ocurriendo en muchos de los cursos y espejos de agua”, explicó Sebastián Melchor, director de Recursos Naturales Renovables de la provincia, Sebastián Melchor, en una entrevista con el diario San Rafael.
“En este contexto, empezamos a ver algo que se viene hablando, se dialoga y cada vez va ganando más espacio, que es la difusión, la conversación, las reflexiones sobre el cambio climático, pero que son una realidad, una realidad muy concreta y que se ve cada vez que Irrigación –como lo hizo este año– desde la transparencia, informa a todos los mendocinos sobre el escenario hídrico. Ahí queda a las claras lo que representa, lo que significa este déficit que estamos teniendo, esta merma en las nevadas que estamos viendo y que, por lo tanto, nos obliga a tener que pensar en estrategias de adaptación”, agregó el funcionario.
Además, Melchor recordó que, previo a la pandemia del Covid-19, y teniendo en cuenta la pérdida de nieve, la baja de los caudales y puntualmente cómo la laguna Las Salinas se iba secando cada vez más, con todo lo que ello implicaba para el recurso ictícola, -especialmente para el pejerrey patagónico, una de las poblaciones casi sin intervención más importantes que tiene Mendoza y ese gran espejo de agua-, decidieron realizar una intervención para poder salvar y poder continuar teniendo a esa especie tan importante en sus aguas.
“Los distintos escenarios que van armando una línea intergubernamental ligada al cambio climático lleva a que haya un conjunto de científicos y técnicos de distintas áreas reunidos para construir medidas a tomar. Sin dudas, se dan disminuciones en las situaciones níveas, en el tamaño de los glaciares y, en consecuencia, en la merma de los caudales de los ríos que dependen de ello. Es una realidad que se planteaba hace varios años, que actualmente se concreta y requiere esa adaptación”, concluyó Melchor.
Cabe recordar que, en el año 2001, la Laguna Las Salinas- a la cual se accede a la altura del kilómetro 744, de la Ruta Nacional N° 14-, fue declarada Área Natural Protegida mediante la Ley Provincial N°6965, con el objetivo de preservar las condiciones naturales y fomentar el desarrollo social a partir de la utilización sustentable de los recursos.
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