Luego de permanecer inactivo por más de 30 años, el tan esperado regreso del tren de pasajeros a la provincia de Mendoza está muy cerca de convertirse en realidad con el inicio de los trabajos para extender el servicio del ramal del Ferrocarrril San Martin desde la estación Justo Daract, en San Luis, hasta la estación General Gutiérrez, ubicada en la ciudad mendocina de Maipú.
“Estamos trabajando en la inspección de la vía entre Justo Daract y la estación Gutiérrez en el Gran Mendoza para que el tren de pasajeros entre la estación porteña de Retiro y la de Gutiérrez, en el Gran Mendoza, vuelva a funcionar antes de fines de este año”, afirmó Martín Marinucci, titular de Trenes Argentinos.
“La vuelta del ferrocarril a la región de Cuyo es parte del objetivo máximo que tenemos establecido. Por eso, tenemos que ir dándole forma a la concreción de este gran sueño no solo para los usuarios de Buenos Aires y de Mendoza, sino, también, para los de los pueblos que se forman parte de este importante ramal ferroviario argentino”, agregó el funcionario ferroviario.
Mientras el ramal que se utilizará será el de Justo Daract-Beazley-La Paz -popularmente conocido por los usuarios como “Vía Beazley”-, el objetivo del masterplan que fue aprobado por unanimidad por la Legislatura de Mendoza incluye los 900 kilómetros de vía que hay en Mendoza, con la intención de recuperarlas y darles vida.
“El tren ya parte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y tiene terminales intermedias antes de llegar a San Luis: son 18, entre ellas las bonaerenses de Pilar y Mercedes, y las cordobesas como Laboulaye y Vicuña Mackenna. Es decir que cuando volvamos desde Buenos Aires, tendremos esas paradas que serán un verdadero polo comercial y turístico, y a su alrededor se construirán viviendas”, explicó Marinucci.
“Me genera mucho entusiasmo que para muchas personas la vuelta de este medio de transporte despierte un sentido identitario. Además, soluciona otros asuntos que nos preocupan en la actualidad y nos seguirán ocupando, como la siniestralidad vial, ya que el tren es un transporte que tiene nivel mínimo de accidentes. Y, en medio de la crisis económica en la que vivimos, es un transporte barato”, concluyó.
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