Si bien las bicicletas están ganando popularidad en un mundo asediado por el coronavirus y la necesidad de mantener la distancia social, la verdad es que muchas veces uno descarta este medio de transporte porque no tiene un lugar donde guardarla, ya sea en casa o en el trabajo. Con esta cuestión en mente, un grupo de ingenieros han desarrollado una alternativa más que ingeniosa: Poimo, una bicicleta eléctrica inflable, que fácilmente se puede guardar en una mochila.
Creada por investigadores de la Universidad de Tokio, Poimo (Portable and Inflatable Mobility) por el momento es solo un prototipo. Esta bicicleta inflable se puede guardar en una mochila e inflar o desinflar en cuestión de minutos cuando uno la necesita.
El inflado se realiza rápidamente mediante una bomba de aire. Después de hacer esto, se conectan los componentes rígidos como el motor, las ruedas, la batería y el volante. Todo esto se puede transportar en una mochila y su peso total es de 7,3 kg, aunque sus diseñadores dicen que podrían reducir aún más el peso para la versión final.
Una de las características más interesantes de Poimo es que está compuesto por una estructura inflable pero bastante rígida. Esto se debe al uso de poliuretano termoplástico (TPU), un material fácilmente personalizable para obtener las formas deseadas y que tiene la resistencia suficiente para soportar el peso de una persona. Además, este material puede ser utilizado para otros usos, como por ejemplo para la construcción de sillones.
Galería de imágenes
Comentarios