Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Pese al frío, las tarariras dijeron presente en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

Las primeras tarariras ya picaron en el río Uruguay. Foto: David del Valle

PESCA DEL DÍA

Aun con frío, ya pescamos las primeras tarariras

El guía David del Valle relevó el río Uruguay a la altura de Villa Paranacito en busca de tarariras, y pese a las bajas temperaturas logró unas cuantas. Galería de imágenes.

Por Julio Pollero

Nuevamente, desde las cañas de David y Rodrigo del Valle pudimos salir a pescar desde la hermosa Villa Paranacito y hacerlo en su gran delta (río Uruguay), como así también en la Tercera Sección del río Paraná. Ellos, junto a un amigo, salieron con la firme intención de pescar dorados, pero siempre pensando en la posibilidad concreta de darle una oportunidad a las tarariras, y mal no les fue.

David es un gran conocedor de toda la zona y sabe muy bien dónde buscarlas, aun con estas temperaturas tan bajas. Los arroyos fueron la mejor opción a pesar de tener el agua un poco fría. La idea fue siempre pescarlas con artificiales, tanto con señuelos duros como con gomas y, también,  gomas con cucharas. Entrando sin hacer ruido a cada uno de los arroyos fueron mejorando performance a medida que el día se iba templando. 

Primero intentaron con señuelos como los Chake, Allien y otros tipos de cranks, con buenos resultados, hasta que alguno puso un señuelo de látex con cuchara giratoria... y ahí comenzó la fiesta. Los piques se daban uno tras otro, todos los pescadores tenían acción. La idea era arrojar sobre la costa y a velocidad media traccionarlos hasta la embarcación. Si bien las taruchas aún no estan muy agresivas, tomaban con voracidad el engaño. 

Otra forma de pescarlas era pasar los señuelos paralelos a la costa, situación más común sabiendo que las taruchas buscaban esas estructuras para tomar calor y esperar por sus presas. Rodrigo, el más joven de los pescadores, pero no por eso menos experimentado, daba cátedra en la proa de la embarcación, situación que miraban sus compañeros y muuuuucho no les gustaba, pero dejaron que se divirtiera a lo grande. 

Hace muy poquito mostramos una gran pesca de dorados en esta misma zona, ahora le sumamos las taruchas, dos especies ideales para pescarlas con artificiales utilizando los equipos adecuados y disfrutando la situación. Hoy solo pueden pescar lo habitantes del lugar, pero cuando se habilite la salida de la cuarentena, es un lugar para tener muy en cuenta.

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