Para este 2021, tras una larga espera motivada por la pandemia que los dejó sin la cita mundialista programada para 2020 en Alemania, se realizó en Italia el 23° Campeonato del Mundo de Longcasting. Allí 34 calificados casters que representan a distintas selecciones compitieron en el campo Federal Mario Filidei, en las afueras de Coltano, un pueblo de la Toscana.
Como es tradicional, se tiran 4 plomos de diferentes pesos, arrancando por los más pesados: 175, 150, 125 y 100 gramos, divididos en cuatro días de competencia. Los dos primeros plomos fueron para la actual referencia, el crédito de Tandil, con raíces en la localidad de Gardey, Salvador Bustos, quien consiguió el récord mundial en 175 g, superando su labor de 2018, con 267,45 m.
En 125 grs, la sorpresa la dio el marplatense Juan Gabriel Hamber, debutante absoluto que dio que hablar al superar a Bustos, quien se recuperaría en el cierre, quedándose con el último plomo y el tetracampeonato, hilando así cuatro títulos consecutivos.
Por su parte, el equipo argentino se quedó con el campeonato por selecciones por tercera vez en su historia, tras ganar en 2016 y 2018. La selección estuvo conformada por Bustos, Hamber, Juan Pablo Peralta, de Claromecó, y Ezequiel Morales, de Monte Hermoso.
Pasaron 23 años desde aquel primer mundial que se desarrolló en Estados Unidos y donde el belga Danny Moeskops arrasó con todos los plomos, con los ingleses y sudafricanos, luchando metro a metro, pero a distancias prudenciales.
Se sumarían los italianos con el correr de los años, pero en Argentina, aún el movimiento del longcasting era insípido. Un interés que crecía lentamente y que tendría en Luis Solimeno, uno de los grandes exponentes en los inicios. Ganador del primer título en 100 gramos, allá por 2008, que cortó una seguidilla impresionante de Moeskops.
El marplatense fue quien tiró la piedra en muchos lugares, entre ellos en Tandil, dónde tras una clínica gestada por el desaparecido Tandil Pesca Club, apareció Salvador Bustos, quien daría que hablar con el correr de los años. Así como este, muchísimos ejemplos podríamos citar a lo largo y ancho del país, aunque es fuerte el crecimiento de la actividad en AMBA y la provincia de Buenos Aires.
Argentina no dejó de un año a otro de ser un participante más y convertirse en el país a batir. Fue un largo proceso que abarcó a muchísimos actores que dieron forma al salto de crecimiento. De grandes labores desde 2013, la explosión llegó en 2016, cuando el balcarceño Marcelo Wagner le dio a la celeste y blanca el primer halago individual y también por equipos, con Bustos, Solimano, Ignacio Anaya y Mario Montania, un selecto equipo que parecía que no iba a volver a dar una alegría tal, pero que se repitió en 2018 y en este año; hablando por selecciones, ya que en el carácter individual, la máquina de tirar plomos fue Bustos, quien hilo su tetracampeonato en Italia, una tierra que le sienta bien, ya que aquí había conseguido el segundo, tras aquella seguidilla que arrancó en 2017 por Francia y siguió por Sudáfrica 2019.
Final de un proceso que duró más de un año y medio, porque la planificación para este evento se extendió mucho más de lo normal, pandemia mediante. La suspensión del 2020, la incertidumbre que se vivió de cara al viaje, si habría vuelos, si llegarían desde lo económico, si los PCR darían negativos y hasta que lleguen los tubos con las cañas fueron algunas de las preocupaciones de todo un equipo nacional que fue una vez más al viejo continente y la rompió.
A esta hora están pisando tierra argentina todos con un objetivo cumplido. Un Bustos inalterable, que podrá ganar y perder, pero que la batalla general, la suma de los cuatro plomos, será difícil de destronar. Cumplido para Hamber, que debutó y estuvo a nada de destronar a quien parece invencible y nos deja la sensación de que el futuro ya está asegurado.
También para Peralta, la revelación metida entre los de arriba, callando a los que hablaron de más y haciendo un mundial soñado. Y Morales, que de menor a mayor fue superándose y metiéndose entre los mejores del mundo. No podemos no mencionar a Luciano Stati, el incansable y necesario capitán del equipo que año tras año está presente, otro que se sentirá confortado por un nuevo éxito deportivo y humano, ya que gestó un grupo sensacional.
Un 2021 que ya entra en tiempos de análisis y se proyecta un 2022 donde Sudamérica será anfitrión de los mejores, con Paraguay como la probable próxima estación del longcasting mundial, una actividad que, si la pandemia lo permite, volverá a tener competencia local, provincial y nacional, para llegar de la mejor manera a defender lo que han hecho estos heroicos tiradores que hicieron que se vean a los argentinos como el reflejo a imitar. Qué lindo que sea así.
Resultados Mundial 2021
- 175 gramos: 1° Salvador Bustos (Gardey- Tandil- Argentina) 267,45 metros, 2° Juan Gabriel Hamber (Mar del Plata – Argentina) 256,45 metros, 3° Rafael Sanzó (Uruguay) 252,69 metros.
- 150 gramos: 1° Salvador Bustos (Gardey - Tandil - Argentina) 278 metros, 2° Juan Gabriel Hamber (Mar del Plata - Argentina) 268.83 metros, 3° Juan Pablo Peralta (Claromecó - Argentina) 268.64 metros.
- 125 gramos: 1° Juan Gabriel Hamber (Mar del Plata – Argentina) 271.49 metros, 2° Salvador Bustos (Gardey – Tandil – Argentina) 267.63 metros, 3° Rafael Sanzo (Uruguay) 263.83 metros.
- 100 gramos: 1° Salvador Bustos (Gardey – Tandil – Argentina) 267.85 metros, 2° Juan Gabriel Hamber (Mar del Plata – Argentina) 260.39 metros, 3° Biagio Morra (Italia) 253.57 metros.
- General Final: 1° Salvador Bustos (Gardey - Tandil - Argentina), 2° Juan Gabriel Hamber (Mar del Plata - Argentina), 3° Rafael Sanzo (Uruguay), 4° Juan Pablo Peralta (Claromecó - Argentina), 5° Biagio Morra (Italia), 6° Filipo Montepagano (Italia), 7° Matteo Monti (Italia), 8° Massimo Gargiulo (Italia), 9° Freddie Nel (Sudáfrica), 10° Marius Coetzee (Sudáfrica), 12° Ezequiel Morales (Argentina).
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