Día Mundial de los Océanos: por qué no podemos vivir sin ellos

El 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos, con el fin de reivindicar la importancia que los mares y las especies que los habitan tienen en nuestra vida diaria. Muchas personas no lo tienen en cuenta, pero los océanos representan el pulmón del planeta, ya que generan el oxígeno que necesitamos para vivir. Pero su aporte a nuestra vida no termina acá, su importancia dentro del planeta es aún mayor. Repasemos sus aspectos más importantes.

Antes que nada, los océanos son la principal fuente de vida sobre el planeta. En sus profundidades habitan inmensos ecosistemas marinos conformados por miles de especies animales y vegetales. Algunas viven en profundidades tan bajas que solamente se las ha divisado un par de veces. Obviamente, la contaminación del hombre ha generado un gran daño al respecto, provocando la destrucción de parte de su biodiversidad.

Como ya se dijo, los océanos también son el principal pulmón del planeta. Generalmente se suele escuchar que los bosques y las selvas son las responsables de esta función, pero lo cierto es que los mares y la vida dentro de ellos absorben alrededor del 25 % del dióxido de carbono de la atmósfera. Aun así, la absorción de carbono también los vuelve más ácidos, fenómeno que se ha agravado considerablemente con el calentamiento global. Hoy los océanos son más ácidos de lo que han sido en al menos 800.000 años, lo que claramente está afectando a muchas especies marinas.

Tampoco hay que olvidarnos de que los mares son una enorme fuente de alimento y energía. Desde hace siglos que nos valemos de las especies que los habitan para alimentarnos. Además, de sus profundidades extraemos recursos energéticos como gas o petróleo, como también metales preciosos. A su vez, pensando a futuro, los parques eólicos marinos, como también la energía de las olas, pueden convertirse en enormes fuentes de energía renovable.

Los océanos son y han sido fundamentales para el desarrollo del ser humano. Es importante que empecemos a valorarlos por lo que realmente son, el eje de toda la vida sobre nuestro planeta.