Causó sorpresa la visión de una parte del Túnel Subfluvial ante la bajante del río Paraná pero, según indicaron las autoridades que administran esta obra de ingeniería del lado santafesino, se profundizaron los controles para verificar que la estructura esté en buenas condiciones y se determinó que no corre peligro la estructura. Comprobaron la estabilidad de la obra y que la manta que protege al Túnel Subfluvial Uranga - Sylvestre Begnis, aunque quedó al descubierto, no se ve afectada. Lo que más perjudica su estructura son las crecidas. Estos controles son de rutina.
Se hicieron 22 recorridos de control y el comportamiento de la defensa es bueno, aclararon. El confinamiento del suelo que está arriba del túnel garantiza la estabilidad hídrica de la obra.
Estas mantas protectoras fueron confeccionadas en dos etapas. La primera fue de 600 metros, 50 m aguas arriba y otra de 50 m aguas abajo. Están hechas de material geotextil, hormigón y alambre, son cuadrículas colocadas arriba del lecho natural del río para hace que el suelo que está entre el túnel y la malla se confine en espacios determinados previamente. Estas mallas, al quedar al descubierto no pueden resultar dañadas y lo que está expuesto por la bajante son los últimos metros de la segunda etapa de 300, la parte más alta del túnel está ubicada entre los 12 y 15 m de profundidad, por lo que se estima que queda mucha arena depositada en el medio y se está lejos de que la estructura del túnel presente problemas.
La histórica bajante del río Paraná afecta actualmente a cinco provincias argentinas (Misiones, Corrientes, Chaco, Entre Ríos y Santa Fe) y se estima que los niveles en descenso se mantendrán hasta la última semana de mayo, acotando la navegación por gran parte de la hidrovía.
Fuente: Elonce.com.
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