El reconocido genetista norteamericano, George Church, de la Universidad de Harvard, junto con la frma Laboratories & Biosciences Colossal, están trabajando en un proyecto por demás ambicioso: revivir al mamut lanudo, especie que desapareció de la faz de la Tierra hace unos 10.000 años.
Descubren el esqueleto casi completo de un mamut
“Nuestro principal objetivo es poder tener nuestros primeros terneros en los próximos cuatro a seis años", expresó, al diario británico The Guardian, el empresario tecnológico Ben Lamn, fundador de Colossal y socio de Church en esta aventura para la cual ya llevan recaudados 15 millones de dólares.
”Nunca antes la humanidad había podido aprovechar el poder de esta tecnología para reconstruir ecosistemas, sanar nuestra Tierra y preservar su futuro a través de la repoblación de animales extintos”, agregó Lamn.
El primer paso será la creación de un híbrido de elefante y mamut a través de embriones de laboratorio que porten ADN del mamut, para lo cual tomarán células de la piel de elefantes asiáticos -que están en peligro de extinción- y buscarán reprogramarlas para convertirlas en células madre más versátiles que puedan transportar el ADN de mamut.
En tanto, en el caso de los genes particulares que son responsables del pelo de mamut, las capas de grasa aislante y otras características que permiten su adaptación al clima frío, los científicos van a combinar los genomas de mamut extraídos de animales recuperados del permafrost al norte del círculo polar ártico con los de los elefantes asiáticos.
Los embriones que resulten de este proceso se introducirían en una madre sustituta o en un útero artificial y, si todo sale según lo tienen planeado Church y Lamm, se espera que puedan tener un híbrido mamut-elefante para el 2027 y un mamut puro dentro de una década.
“Nuestro objetivo es hacer un elefante resistente al frío, pero éste se verá y se comportará como un mamut”, explicó, por su parte, Church, a The Guardian.
“Esto no significa que estemos tratando de engañar a nadie, sino que queremos algo que sea funcionalmente equivalente al mamut, que disfrute de su tiempo a -40°C y que haga todas las cosas que hacen los elefantes y mamuts, en particular derribar árboles ", agregó.
Los científicos están totalmente convencidos de que la introducción de manadas de híbridos de elefante y mamut en la tundra ártica ayudará a restaurar el hábitat degradado, como así también, a combatir algunos de los tantos impactos que la crisis climática le está ocasionando a la humanidad y, en particular, a la Naturaleza. “Por ejemplo, al derribar árboles, las bestias podrían ayudar a restaurar las antiguas praderas árticas”, concluyó Church.
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