El fin de semana largo arrancará con un Jueves Santo con tiempo inestable todavía en las primeras horas en la región indicada anteriormente, desde el NOA hacia el sur de Buenos Aires, pero con tendencia a estabilizarse con el correr del día, en la medida que continúe disipándose la acción del debilitado frente estacionario.
Por su parte, el feriado del Viernes Santo se proyecta como una jornada bien soleada en el centro y norte de Argentina, con temperaturas en ascenso hasta alcanzar una tarde con marcas cálidas a calorosas. En la Patagonia, por el contrario, se estima el ingreso de aire frío e inestable, especialmente en la porción sur en donde se esperan fuertes vientos con ráfagas e incluso nevadas en la ciudad de Ushuaia.
Durante el Sábado Santo estará ingresando hacia el norte de la Patagonia un nuevo centro de bajas presiones con un frente frío asociado. Con el correr del día, es probable que el tiempo vaya desmejorando sobre el sur de la región Pampeana, y también en forma más aislada sobre el extremo norte de Argentina.
En cuanto al Domingo de Pascua, de acuerdo a lo proyectado actualmente por los principales modelos de pronóstico, el pronóstico prevé que habrá un marcado desmejoramiento de las condiciones del tiempo tanto para el centro como para el norte de la Argentina.
En tanto que se espera la llegada de un frente frío a la zona central del país con fuertes vientos del sur con ráfagas y marcado descenso de temperatura durante la jornada, en tanto que también se esperan tormentas fuertes en la provincia de Buenos, Capital Federal y en las provincias del Litoral,
Para el domingo de Pascua, se espera el desarrollo de lluvias y tormentas sobre la región central del país -que acompañarán el desplazamiento del sistema frontal frío., como así también, en la provincia de Córdoba, parte de Santa Fe y en el sur de Santiago del Estero. Mientras que las lluvias serán más débiles en la región de Chaco y la provincia de Formosa.
En tanto que el lunes 1 de abril, se espera que el sistema frontal siga desplazándose hacia el norte y las precipitaciones irán acompañándolo. Por lo tanto, las lluvias alcanzarán el extremo norte del país y gran parte de Paraguay y sur de Brasil zona en la que volverían a potenciarse algunos eventos, provocando tormentas fuertes sobre el este paraguayo.
Hay que resaltar que luego del avance del sistema frontal frío el viento rotará al sector sur y fomentará el descenso de las marcas térmicas de manera muy significativa. De todas maneras, a pesar del fuerte descenso térmico, todavía no se prevé que alcancen el nivel de heladas en la región central del país.
El ingreso de esta nueva masa de aire frío y seco fomentará el descenso de las marcas térmicas por un período relativamente prolongado, pero los valores que se alcanzarán estarán cerca de los parámetros normales para la época del año. Pero esta situación no perdurará demasiado, ya que con el transcurso de la primera semana de abril se observará un nuevo incremento térmico que llevará a las temperaturas, otra vez, a valores por encima de los registros promedios.
Por último, el informe de Meteored señala que para el martes 2 de abril si bien no se observan características de ambiente frío que perdure, se prevé un escalonado descenso térmico con algunos altibajos que irán llevando a la temperatura a valores propios de la época de manera progresiva.
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